Amnistía Internacional denuncia la falta de garantías con la que España ha extraditado a Rusia a un ciudadano checheno

Actualizado: miércoles, 31 diciembre 2008 17:32

La organización asegura que hay peligro de que el ciudadano checheno extraditado sufra torturas y malos tratos

MADRID, 31 Dic. (EUROPA PRESS) -

La ONG Amnistía Internacional (AI) denunció hoy la falta de garantías con la que las autoridades españolas extraditaron hoy a Rusia al ciudadano checheno Murat Ajmedovich Gasayev, bajo riesgo de que éste pueda sufrir tortura y malos tratos una vez entregado a la Justicia rusa.

La Policía Nacional detuvo en 2006 en Mislata (Valencia) a Gasayev, sobre quien pesaba una Orden Internacional de Detención emitida por las autoridades rusas, y el cual pidió ser acogido en calidad de refugiado en 2005, cuando llegó a España.

La organización aseguró en declaraciones a Europa Press que los cargos que se le imputan en Rusia por lesiones, asesinato y terrorismo fueron presentados a raíz de la confesión obtenida bajo tortura de otro ciudadano checheno, y explicó que Gasayev ya fue detenido previamente y que en esa ocasión fue sometido a malos tratos.

Murat Gasayev permaneció detenido en España en régimen de prisión provisional a la espera de la decisión definitiva del Consejo de Ministros acerca de su extradición a Rusia, que se produjo el pasado 12 de diciembre.

PELIGRO DE TORTURAS

La responsable de Política Interior de AI España, Virgina Álvarez, afirmó además que en menos de seis meses, España ha violado en al menos tres ocasiones el principio de no devolución, contenido en la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, el cual estipula que ningún Estado puede, "por expulsión o devolución, poner en modo alguno a un refugiado en las fronteras de los territorios donde su vida o su libertad peligre a causa de su religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social o de sus opiniones políticas".

La ONG recordó que además de Gazayev, el pasado 22 de junio también se extraditó a Siria a Basel Ghalyun, el cual se encuentra actualmente encarcelado y en régimen de incomunicación, por lo que permanecen los temores de que pueda ser sometido a torturas o a malos tratos.

Por ello, Amnistía consideró que las autoridades españolas han violado con dichas órdenes de extradición principios básicos del Derecho Internacional y de Derechos Humanos. En este sentido, Álvarez consideró que esta situación "no puede volver a repetirse". También aseguró que las garantías diplomáticas que se otorgaron en el proceso son únicamente "papel mojado" ya que son casi imposibles de cumplir.

A pesar de que tanto el Comité contra la Tortura de Naciones Unidas como el Comité de Prevención de la Tortura del Consejo de Europa han rechazado ocuparse de seguir el caso concreto de Gazayev, la Audiencia Nacional decidió seguir adelante con la extradición, indicó Álvarez.

Por ello, resaltó que el Gobierno tiene la "responsabilidad" de garantizar la seguridad de los extraditados y de asegurarse de que no sufren ni malos tratos ni torturas. También advirtió de que la organización seguirá el caso de estas personas y que en caso necesario pedirá responsabilidades al Gobierno español.

"GUERRA CONTRA EL TERROR"

Amnistía Internacional solicitó varias veces al Gobierno español que no autorizase dicha extradición, pues considera que Gasayev corre el riesgo de ser sometido a un juicio sin las debidas garantías, a tortura o a otros malos tratos en Rusia, uno de los países que más ha utilizado el lenguaje de la "guerra contra el terror" para justificar acciones represivas contra personas acusadas de actividades terroristas.

Gasayev fue detenido en Ingushetia a finales de agosto de 2004. Según su testimonio citado por AI en un comunicado anterior, fue trasladado a la sede central del Servicio Federal de Seguridad en la región de Ingushetia, donde lo torturaron e interrogaron durante tres días en relación con un ataque armado contra dependencias gubernamentales que había tenido lugar dos meses antes de su detención.

Según sus afirmaciones, las autoridades querían que Gasayev les señalara a personas que pudieran estar implicadas en las actividades de los grupos armados y le enseñaron fotografías de personas que supuestamente pertenecían a la guerrilla chechena.

Al cuarto día, junto con otro detenido, fue conducido a una furgoneta. Tras decirles que les iban a fusilar, les hicieron bajar en una zona despoblada y les dejaron en libertad sin presentar ningún cargo. Ya en libertad, Murat Gasayev tuvo conocimiento de que otro hombre detenido e interrogado por las fuerzas de seguridad federales rusas le había implicado en unos ataques perpetrados en junio de 2004. El hombre se retractó de su declaración posteriormente ante el tribunal, alegando que fue obligado mediante torturas a facilitar nombres de las personas que supuestamente habían participado en el atentado.

Ante el temor de ser nuevamente detenido y torturado, Murat Gasayev huyó de su país y llegó a España, donde solicitó asilo inmediatamente el 3 de junio de 2005. La Federación Rusa cursó posteriormente una orden de búsqueda y captura con vistas a su extradición, motivo por el cual fue detenido en España. Su solicitud de asilo, que llevaba más de un año y medio pendiente, fue denegada al poco tiempo de la detención, en base a un informe confidencial elaborado por las autoridades españolas, y al que no tuvo acceso ni él ni su abogado.

La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional dio el visto bueno a la entrega de Gasayev el 8 de febrero de 2008. Los magistrados tuvieron en cuenta para su decisión las garantías ofrecidas por la Fiscalía General rusa, encargada de los asuntos de extradición, de que el detenido no sería condenado a muerte ni a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional. Las autoridades rusas también ofrecieron garantías de que mientras estuviera privado de libertad, Gasayev podría recibir las visitas del Comité de la ONU contra la Tortura.

Por otra parte, la ONG Human Rights Watch envió una carta a la Audiencia Nacional en junio de 2007, manifestando su preocupación por la seguridad de Gasayev en el momento de su regreso a Rusia y exhortando al tribunal a denegar la solicitud de extradición. El Comité Europeo para la Prevención de la Tortura y de las Penas o Tratos Inhumanos o Degradantes del Consejo de Europa, ha expresado reiteradamente su preocupación relativa a la tortura, los malos tratos y la detención ilegítima a manos de agentes rusos en Chechenia.

Este diagnóstico de la situación de los Derechos Humanos fue el que utilizó un tribunal británico en 2003 para rechazar la extradición de Ajmed Zakaev, un checheno exiliado en ese país, a pesar de las garantías ofrecidas por Rusia.