Pide una corriente alejada de "la mayoría orgánica que dirige el partido desde hace 20 años"
BARCELONA, 5 Ene. (EUROPA PRESS) -
El exconsejero de Educación y diputado del PSC en el Parlamento catalán Ernest Maragall ha asegurado este jueves que está dispuesto a romper la disciplina de voto de los socialistas catalanes en la Cámara cuando vaya en contra de sus posicionamientos sobre como considera que debe actuar el partido.
En declaraciones a Europa Press, ha subrayado que por coherencia no puede votar en el Parlamento autonómico en contradicción con las ideas que defiende: "No tiene sentido tirar la piedra y esconder la mano".
El dirigente socialista ha recogido sus ideas fuerza en un apunte en su blog recogido por Europa Press, donde se ha comprometido a trabajar por un PSC reformista que apueste por ser "inequívocamente catalán" y tenga voz y voto propios en todas las instituciones, que abogue por una relación Cataluña-España basada en un pacto federal y que defienda a la democracia por encima de los poderes financieros.
Además, Maragall se ha puesto a disposición de todos los socialistas que sin renunciar a su condición de afiliados del PSC quieran trabajar por un proyecto que asuma "estas señas de identidad de forma irrenunciable" y que estén dispuestos a hacer pública de forma inmediata sus bases ideológicas y propuestas concretas.
"Esto requerirá la constitución de un colectivo organizado que, desde el respeto debido a los estatutos, personas y cargos, actúe de forma consecuente y organizada para elaborar, comunicar y consolidar un núcleo de pensamiento y propuesta política" en la línea de la defendida por el exconsejero.
PSC: "SILENCIO AUTOAPLICADO"
A título individual Maragall se ha comprometido a defender estas posiciones aunque impliquen entrar en contradicción en algún momento con el partido o el grupo del PSC en el Parlamento catalán, y ha señalado que mostrará su discrepancia abiertamente.
"En nuestro partido hay mucha rabia contenida, demasiado silencio autoaplicado, mucha soledad personal o de pequeños colectivos, demasiado respeto por quien quizás no lo merecía", ha sostenido.
CRÍTICAS A LA NUEVA DIRECCIÓN
Maragall, que en el congreso que el PSC celebró en diciembre quedó fuera de la Ejecutiva del partido, ha criticado la nueva dirección del partido comandada por el alcalde de Terrassa, Pere Navarro, y que representa "la misma mayoría orgánica que dirige la organización desde hace más de 20 años".
Según el exconsejero, el congreso no supuso la renovación de la que presumía el partido puesto que "es bien visible la continuidad más o menos disfrazada de personas clave en el periodo anterior".
Maragall ha censurado también "el silencio clamoroso" del PSC durante el debate de investidura de Mariano Rajoy, perdiendo la oportunidad, a su juicio, de exhibir la propuesta de voz propia en el Congreso que contemplaba la enmienda impulsada por los alcalde de Lleida y Sabadell, Àngel Ros y Manuel Bustos, y que fue aprobada en el congreso del PSC.
