La erupción del volcán Cotopaxi se suma al "infierno" de los españoles presos en Ecuador

Foto del volcán de Cotopaxi tomada por los presos desde la cárcel
Foto: EUROPA PRESS
 
Actualizado: martes, 1 septiembre 2015 16:49

Correa impone la censura a todos los medios de comunicación sobre este asunto prohibiendo "cualquier difusión no autorizada"

   MADRID, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -

   Los centenares de presos que atestan la cárcel ecuatoriana de Latacunga llevan días expuestos a la ceniza, el vapor y los gases que emite el volcán Cotopaxi. Entre ellos decenas de españoles que cumplen condena en ese penal construido en un lugar próximo al volcán y cuyos familiares en España denuncian en declaraciones a Europa Press la inacción de las autoridades.

   Según dicen, mientras ya se ha desalojado a varias aldeas de la zona, en la cárcel tan sólo les han repartido unas mascarillas que consideran insuficientes. "También les han dicho que en caso de ser desalojados, utilicen una toalla mojada y se la pongan en la boca", denuncia desde Barcelona la pareja sentimental de uno de los presos del "infierno" de Latacunga.

   Esta mujer relata un "calvario" diario de mafias de presos que amedrentan a otros internos, escasez de comida, agua no potable, insuficiente atención médica o funcionarios que actúan a base de sobornos y hasta organizan peleas "casi a muerte" entre presos por diversión.

CONTACTO POR MÓVIL

   Desde España, los familiares mantienen contacto con sus allegados de forma más o menos regular a través de teléfonos móviles que los presos adquieren en la cárcel y comparten entre varios internos (en teoría no están permitidos). "Nosotros recargamos desde aquí el saldo de los teléfonos para poder hablar con ellos", indica uno de los familiares a Europa Press.

   Así les han podido contar, por ejemplo, que la última medida de la cárcel es no echar el cerrojo de las celdas por la noche por si acaso tuviesen que ser desalojados de urgencia. Otra vía de información de los familiares es visitar los medios de comunicación locales.

   De este modo, por ejemplo, pudieron saber que el pasado 15 de agosto las autoridades ecuatorianas evacuaron las poblaciones de Mulaló, Lasso y parte de Latacunga, todas ellas en la misma región de Cotopaxi donde se encuentra la cárcel.

"MEZCLA DE CENIZA, ROCAS Y GASES"

   También que el Instituto Geofísico de Ecuador detectó que el volcán había empezado a emanar flujo piroclástico, según este organismo, "una mezcla de ceniza, rocas y gases que pueden tener altas temperaturas y que desciende por los costados del volcán a altas velocidades".

   Este mismo lunes, los medios de comunicación ecuatorianos afirmaban que el volcán sigue emanando gases y recogían unas declaraciones del ministro Coordinador de Seguridad, Cesar Navas, quien confirmaba el mantenimiento de la alerta amarilla en el volcán Cotopaxi, es decir, continúan las acciones para prevenir una posible erupción.

   El propio Navas aseguró a mediados de agosto que para la evacuación de los presos de la cárcel de Latacunga, en caso de ser necesario, existe un plan por parte del Ministerio de Justicia, según los medios locales.

   Los simulacros de evacuación son constantes en las zonas de riesgo y en concreto ha habido hasta nueve en los valles cercanos a Quito. En cualquier caso, toda la información sobre el volcán está pasada por el filtro de la censura impuesta por el Gobierno de Correa.

DECLARADO EL ESTADO DE EXCEPCIÓN

   El presidente ecuatoriano decretó "el estado de excepción en todo el territorio nacional para afrontar el proceso eruptivo del volcán Cotopaxi". Además de garantizar la disposición de los Departamentos de Defensa, Seguridad y Finanzas, Correa decretó "la censura previa en la información que respecto al proceso eruptivo emitan los medios de comunicación social".

   Según dice, "a efectos de garantizar la seguridad ciudadana", la gente podrá informarse por "los boletines oficiales que, al respecto, emita el Ministerio Coordinador de Seguridad, quedando prohibida la difusión no autorizada por cualquier medio de comunicación social ya sea público o privado ya sea por las redes sociales".

   Los familiares de los presos consultados por Europa Press denuncian que las fotos que publican los medios de comunicación no reflejan hasta qué punto afectan los gases a los presos. Estos familiares cuentan con las fotos que los reclusos les envían con sus móviles sobre la humareda que pueden ver al otro lado de la ventana.

   Alguno de los presos ya ha escrito comunicaciones a las autoridades exigiendo soluciones y denunciando su exposición a los gases de este volcán que, según dicen, "lanza humaredas de gas y azufre".