España podrá reimplantar la moratoria sobre búlgaros y rumanos si percibe "perturbaciones" en el mercado laboral

Actualizado: viernes, 19 diciembre 2008 18:27

MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno español podrá reimplantar la moratoria laboral que pesa sobre los ciudadanos búlgaros y rumanos desde la adhesión de ambos Estados a la UE si percibe en los próximos cinco años "perturbaciones" en el mercado de trabajo, informó hoy a Europa Press el secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido.

Tras precisar que el Ejecutivo no cree que se vaya a producir ninguna distorsión en el mercado laboral como consecuencia de no renovar la moratoria, que expira el próximo 31 de diciembre, López Garrido indicó que en el supuesto de que este extremo se produjera, el Gobierno dispone de tres opciones distintas para reimplantar las restricciones a rumanos y búlgaros para trabajar por cuenta ajena en España.

De acuerdo con el Tratado de Adhesión de Rumanía y Bulgaria, el Ejecutivo español puede pedir a la Comisión Europea que acuerde de nuevo la moratoria, solicitárselo al Consejo de la UE --que tendría que adoptar la decisión por mayoría cualificada-- o incluso, si considerase "urgente" la reimplantación de la medida, tiene la capacidad de recurrir de nuevo a la moratoria de forma unilateral e "inmediata", eso sí, con una comunicación al Ejecutivo comunitario, que tendría que dar después su visto bueno, precisó López Garrido.

El secretario de Estado destacó no obstante que el Gobierno considera que la no renovación de la moratoria --decisión tomada hoy por el Consejo de Ministros-- tendrá "un efecto neutro", por lo que no se espera una llegada masiva de ciudadanos de estos dos países a España.

En este sentido, destacó que la llegada de trabajadores extranjeros a España está relacionada con "las condiciones del mercado", por lo que si el mercado demanda menos empleados, no cabe esperar afluencias masivas de demandantes de empleo extranjeros, sino todo lo contrario, que haya trabajadores extranjeros que opten por volver a sus países.

López Garrido recordó además que rumanos y búlgaros son ciudadanos europeos y remarcó que la moratoria es una medida de "excepción" ya que afecta a la libre circulación de trabajadores europeos.