La Iglesia no tiene miedo en abrir los archivos secretos sobre el Holocausto que contarán "la verdad", según experto

PRESIDENTE INSTITUTO NOTRE DAME JERUSALÉN
EUROPA PRESS
Actualizado: sábado, 24 mayo 2014 12:41

JERUSALÉN, 24 May. (de la enviada especial de Europa Press Laura Ramírez) -

El presidente y director del Instituto Notre Dame de la Santa Sede en Jerusalén, el padre Juan María Solana, ha asegurado que "la Iglesia no tiene ningún miedo de abrir" los archivos secretos del Vaticano que hacen referencia al Holocausto y que cuando se abran "se encontrará la verdad de las cosas" y no las "fantasías" que circulan.

En todo caso, ha explicado que cada institución o Estado tiene sus propias reglas y que el Vaticano tiene el criterio de esperar un "tiempo prudencial" para que estos archivos puedan ser estudiados por los investigadores.

En general, ha indicado que "ojalá" se abran "pronto" los archivos secretos del Vaticano, aunque ha indicado que al tratarse muchos de ellos de documentos delicados, hay que esperar un tiempo prudencial de más de 60 años para sacarlos a la luz.

Precisamente, sobre el estudio de los archivos, ha explicado que la primera vez que se estudiaron fue en el siglo XVIII por un historiador alemán protestante, Ludovico Pastor, que trabajó durante 30 años con los documentos y que al terminar se hizo católico pues dijo que después de todo lo que había leído, si la Iglesia seguía adelante significaba que "verdaderamente es de Dios".

Ante la visita del Papa a Tierra Santa, que ha comenzado este sábado, Solana se ha centrado en el motivo del viaje, los 50 años del encuentro entre el Patriarca Atenágoras y el Papa Pablo VI, para indicar que la división de los cristianos es "un dolor muy grande". Según ha recordado, ese encuentro "rompió el hielo" y continuó con el encuentro entre Bartolomé I y Juan Pablo II a finales de la década de 1980 en el Vaticano.

Precisamente, en ese encuentro, el padre Solana, que es Legionario de Cristo, se encontraba junto a otros seminaristas y pudieron intercambiar unas palabras con el Papa Wojtyla que les dijo que para él era un "regalo" poder encontrarse con el Patriarca de la Iglesia Ortodoxa Griega y les indicó que había tenido que "gritar mucho" para conseguir ese encuentro, unas palabras que Solana interpreta en términos de oración.

En este sentido, ha asegurado que, después de que Atenágoras y Pablo VI "rompieran el cristal" comenzó un proceso que se ha ido extendiendo a todos los niveles. No obstante, ha admitido que hay que seguir avanzando porque "todavía hay muchas reservas". En este sentido, ha contado que en el Instituto Pontificio Notre Dame que él dirige se alojan peregrinos de todas las religiones y ha explicado que los cristianos ortodoxos se alojan pero no hablan con los católicos.

Entre las "muchas" fracturas en el cristianismo, ha destacado la que existe con los armenios, con los coptos, pero ha indicado que una "muy dolorosa y grande" fue la que se produjo con el protestantismo. En todo caso, ha señalado que si en una familia con la misma lengua, educación y cultura "a veces surgen divisiones, qué se puede esperar de una familia de 2.000 millones de miembros". "La unidad en el mundo religioso es un don de Dios", ha insistido.

El Patriarca Bartolomé I ya se encontró con el Papa Francisco en la misa de inicio de su Pontificado y conversó con él varios minutos. Según ha indicado Solana, fue entonces cuando el Patriarca invitó al Papa a Jerusalén mostrando su "voluntad de diálogo". El Papa Francisco y el Patriarca Bartolomé I se encontrarán este domingo en el Santo Sepulcro de Jerusalén, el lugar "más santo" del cristianismo.

CRISTIANISMO Y JUDAÍSMO, "MUCHO EN COMÚN"

Sobre la situación en Tierra Santa, el padre Solana ha indicado que está "en la frontera entre los diversos bloques y mundos creados a través del tiempo en el campo político, cultural y económico" y que "es normal que si se toca esa frontera aparezcan inquietudes, desconfianzas, susceptibilidades".

En cualquier caso, ha afirmado que en Israel el mundo cristiano, islámico, judío, conviven y hay "un equilibrio" aunque "bastante frágil" que hay que saber "entender y respetar". Concretamente, ha indicado que "cristianismo y judaísmo tienen muchísimo más en común que diferencias".

Preguntado por el mensaje que puede lanzar el Papa Francisco, el padre Solana ha precisado que el Pontífice "no tiene actitud de revolucionario, sino de reconciliador, que sabe poner un toque de humanidad muy grande a las situaciones tensas". "Hablan de él como el Vaticano II encarnado, vivido", ha añadido.

En cuanto al ambiente que se vive en Israel ante la llegada del Santo Padre, Solana ha indicado que la visita genera "curiosidad", por lo que va a decir o hacer porque a la gente "le cae bien". En todo caso, ha precisado que, como cualquier visita de un Papa, jefe de Estado o ministro, para algunos significa algo positivo y para otros, menos, pero considera que no hay que dar mayor peso a las manifestaciones negativas que se han producido.

El Papa, según ha concretado, no es un político sino una autoridad moral y "su misión no es solucionar problemas políticos" pero cree que "puede dar consejos de tipo moral", unas "pautas que pueden ser útiles".

Sobre la duración del viaje, Solana ha remarcado que es "tan breve" que "ha causado desilusión en los ciudadanos, sobre todo entre los cristianos de Galilea, que están tristes porque les hubiera gustado que fuera a Nazaret".