Atienden a una tortuga boba con una "gran fractura" en el caparazón tras impactar con una embarcación

ALMERÍA 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

Efectivos del Programa de Recuperación de la Fauna Marina de Almería (Promar) han atendido a un ejemplar de tortuga boba --Caretta caretta-- en la playa de Balerma, El Ejido (Almería) que presentaba una "gran fractura" en su caparazón producida por el impacto de una embarcación.

Según indicó Promar en una nota, los efectivos fueron alertados a través de una llamada de la Guardia Civil el pasado día 23 para que acudieran a atender al ejemplar que llegó a la costa transportado por una embarcación y que fue cuidado por los vecinos hasta la llegada del equipo técnico, que determinó que la tortuga tenía un tamaño de 75 centímetros de longitud de caparazón curvo.

Tras ser recogido, el animal fue trasladado a una clínica veterinaria donde se le practicó una atención clínica inmediata, ya que sufría una fractura en región craneal del caparazón y mostraba una herida inciso-contusa con zona de necrosis, herida que no afecta a la ventilación del animal según se comprobó tras los análisis clínicos.

De este modo, se le aplicó tratamiento general de amplio espectro consistente en antibióticos, antiinflamatorios y analgesia, así como fluidoterapia, y cuidados locales de la herida. De acuerdo con la experiencia de Promar en este tipo de heridas, contrastado con la de otros equipos veterinarios de recuperación de fauna marina, se debe de proceder a desbidramiento mecánico y farmacológico de la zona lesionada, así como a la fijación mediante placas de osteosíntesis de la fractura de dicha estructura, que se completa con la reconstrucción en fibra de vidrio de la zona lesionada.

Posteriormente, Promar solicitó a la Consejería de Medio Ambiente la cesión del animal para su tratamiento, recuperación y liberación en Almería, según contempla el protocolo de autorización que se concedió a esta organización, y devolverla una vez recuperada al mar con los vecinos y pescadores que atendieron al animal en primera instancia. Sin embargo, la autorización fue denegada y el animal fue trasladado hoy, por orden de la Consejería de Medio Ambiente, a sus instalaciones de Málaga.