Fundación Cepaim atiende a 25 refugiados afganos en Andalucía: "Vienen con una sonrisa porque allí los iban a matar"

Afganos refugiados a su llegada a la Base Aérea de Torrejón (Madrid).
Afganos refugiados a su llegada a la Base Aérea de Torrejón (Madrid). - Jesús Hellín - Europa Press
Europa Press Andalucía
Publicado: miércoles, 1 septiembre 2021 13:47

ALMERÍA 1 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Cepaim ha atendido a lo largo de la última semana a 25 refugiados afganos que han sido trasladados a Andalucía desde la base madrileña de Torrejón de Ardoz para ofrecerles los primeros recursos tras su salida del país a través del aeropuerto de Kabul ante a la crisis humanitaria derivada de la toma de poder de los talibanes.

"Se están adaptando de un momento para otro, pero vienen con una sonrisa porque saben que allí los iban a matar, huyen de la muerte", ha detallado a Europa Press el coordinador de Cepaim Andalucía, Javier Pérez, quien ha señalado las dificultades que han atravesado hasta poder tomar un avión que les llevara a un "país seguro" como es España. "No ha sido fácil, pero vienen con una sonrisa, con la idea de que aquí pueden empezar una vida nueva", ha asegurado ante las primeras tomas de contacto con el personal de la entidad.

La organización ha sido una de las encargadas en facilitar medios en los primeros días a los refugiados, que en algunos casos vienen solos y en otros con sus familias, ya que "en 24 horas tienen que coger una mochila con lo más mínimo para coger un avión e irse a un país extraño, con una lengua extraña", de modo que es necesario "un gran apoyo psicológico" para superar esta transición.

Pérez ha destacado la labor efectuada por el equipo multidisciplinar de psicólogos, educadores sociales, trabajadores sociales y técnicos de acogida, así como de los mediadores, quienes ya en el autobús que los trasladó hasta Andalucía dieron a los afectados las indicaciones iniciales en su propio idioma sobre el lugar al que iban a ir y dónde iban a vivir.

"Le hemos explicado desde lo más simple, como que en junio o julio se pueden encontrar un viento de Poniente con un calor increíble en Níjar, en Roquetas o Almería; a que en España se pueden dirigir a la Policía para cualquier tema de refugio o que si están malos existen centros de salud, y se les saca la tarjeta", ha puesto como ejemplo el coordinador andaluz de Cepaim.

Los afganos mantienen el apoyo de la fundación en los días posteriores, una vez que se han instalado en las viviendas que se les ofrece, para ayudarles en las primeras tareas del día a día, como puede ser hacer la compra o ir al médico. "Si no hablan español, al día siguiente empiezan a dar las clases", ha detallado Pérez, quien ha explicado que no solo comienzan a aprender el idioma "desde el día 1" sino que además se les explica la cultura del espacio en el se encuentran.

A la espera de que consigan la protección internacional que les otorgue estatus de refugiado, para lo que se les brinda asesoramiento jurídico, desde Fundación Cepaim también se trabaja con la población de cara a su próxima inserción laboral en cuanto su situación se regularice. "Les damos atención y cuidados, pero son personas válidas, y de aquí a un mes o dos, irán solos al médico, a comprar o lo que sea", ha señalado Pérez.

"ES FUNDAMENTAL QUE LA POBLACIÓN NO TENGA MIEDO"

La entidad ha valorado la acción desarrollada por el Sistema Nacional de Acogida a Solicitantes de Asilo y Protección Internacional del que depende el Ministerio de Inclusión y ha recalcado el trabajo que habrá que realizar en los próximos meses en una doble vertiente, tanto con las personas refugiadas, como en los barrios y ciudades en los que se asientan, ya que "es fundamental que la población no tenga miedo, no tenga rechazos como vemos en los últimos meses".

"Si ahora estamos estremecidos por la imagen de un padre afgano que le da un niño con meses a un soldado americano y se nos pone la carne de gallina, espero que cuando pasen unos meses y se haya olvidado, se siga pensando en que son personas", ha manifestado Pérez.

Así, espera que conforme la población se asiente y comience a desenvolverse en los lugares en los que se hallen no haya obstáculos por su condición a la hora de encontrar un trabajo o una vivienda propia, ya que eso va a contribuir a "tener una Andalucía mucho más digna".

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