ALMERÍA, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El Centro de Internamiento de Menores Infractores (CIMI) El Molino de Almería ha puesto en marcha un taller para la creación material de protección ante el covid-19 que ha permitido donar, hasta el momento, 48 pantallas protectoras al Hospital Universitario Torrecárdenas de la capital.
La iniciativa del centro, dependiente de la Consejería de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local de la Junta de Andalucía y gestionado por Meridianos, ha surgido tanto de los profesionales como de los jóvenes al conocer de las dificultades para obtener material y equipos de protección, por lo que "decidieron dar un paso adelante y contribuir de forma solidaria mediante la elaboración del material de protección".
Si bien una parte del equipamiento elaborado ha sido donado para los sanitarios del Hospital Universitario Torrecárdenas, otra parte del material será usado por los menores y personal de los centros, mientras que el resto será donado posteriormente a otras organizaciones y colectivos vulnerables y castigados por la crisis del coronavirus, según ha explicado Meridianos en una nota.
El CIMI Molino, en su ánimo de colaboración con diferentes colectivos y organizaciones de Almería, ha mantenido una colaboración desde hace años con el Hospital Torrecárdenas, de la mano de la Asociación de Padres de Niños Con Cáncer de Almería (Argar), a través de un taller de manualidad y arte y diseño con los niños ingresados en oncología del complejo hospitalario.
CAMBIOS EN LA RUTINA
Con el confinamiento por la pandemia de la covid-19, los jóvenes del CIMI El Molino han modificado su rutina diaria, limitándose las salidas y visitas en cumplimiento de las directrices derivadas de la alarma sanitaria.
En esta situación, según el director del CIMI El Molino, Antonio Guerrero, "nuestro centro no ha sido ajeno a esta realidad y ha supuesto todo un reto para los profesionales, intentando mantener la motivación intrínseca de los jóvenes que cumplen medidas judiciales". "Nos sumamos así a las iniciativas sociales que se están promoviendo desde la sociedad civil para aunar esfuerzos y combatir junto con las administraciones públicas esta situación de emergencia social", ha añadido.
Otras entidades han desarrollado talleres similares, lo que refuerza esta estrategia apoyada desde la Administración andaluza, y redunda en una alta valoración de los programas de Justicia Juvenil en la Comunidad andaluza.
"Estos talleres han generado en los jóvenes, una clara concienciación social sobre la problemática, con un mayor sentido de la responsabilidad individual, al tener que respetar las medidas de seguridad como es el distanciamiento social en la elaboración de material de protección, y por otra parte, una oportunidad para motivarles intrínsecamente al contribuir solidariamente en una crisis provocada por la covid-19 que nos afecta a todos", ha explicado el director del CIMI El Molino.
Estas actividades se han integrado en la dinámica educativa de los centros, que disponían de los medios y equipos ya existentes, como son los talleres de diseño 3D para la elaboración de las pantallas en Almería, y el taller de modelismo y patronaje para la confección de mascarillas en el CIMI Sierra Morena, de Córdoba.
De este modo, los jóvenes y educadores del CIMI El Molino han elaborado las pantallas protectoras siguiendo las recomendaciones del Ministerio de Industria y Comercio para la elaboración de este tipo de pantallas. Los talleres se han organizado guardando la distancia de seguridad entre menores y educadores, creando dinámicas con turnos de diferentes equipos de trabajo.
En el caso de las mascarillas higiénicas, cada grupo tiene asignada unas tareas y unas funciones específicas: el corte y medición de la tela y las gomillas, la unión de los elementos, y el cosido, planchado de los pliegues y desinfección de las mismas.
En relación a las pantallas protectoras, los jóvenes internos han participado en el diseño de las pantallas, en la realización del fichero para la impresión de las pantallas, y en el montaje final de estas. Se han utilizado dos impresoras 3D. El diseño está basado en el prototipo que en la actualidad están utilizando la mayoría de centros sanitarios y otros centros sociosanitarios.
Meridanos, para la implementación de ambos talleres, ha seguido las medidas y recomendaciones del Ministerio de Sanidad e implementando los protocolos y medidas necesarias, así como medidas pertinentes para su desinfección para garantizar la seguridad y la salud de todos los empleados y la de los menores internados en sus centros.
UN EQUIPO MULTIDISCIPLINAR
El CIMI El Molino dispone de un equipo multidisciplinar especializado constituido por psicólogos, coordinador de retorno, educadores sociales y técnicos educativos, entre otros profesionales. El centro tiene una capacidad para la atención de 66 menores infractores y cuenta con una unidad de internamiento terapéutico en tóxicos y salud mental, solo femenino.
Además, cuenta con talleres que complementan la propuesta integral del programa y que son un elemento clave para el proceso de normalización e integración de los menores. Su objetivo final será la obtención de una cualificación profesional. Estos talleres son: peluquería, arte y diseño, jardinería y mantenimiento de edificios, al que se ha unido el de pantallas protectoras y mascarillas higiénicas, frente a la covid-19.
Meridianos, una entidad con más de 20 años de experiencia de trabajo con jóvenes, en los ámbitos de la protección, la educación, el empleo y la justicia, tiene como misión generar oportunidades para los jóvenes a través de métodos e ideas innovadoras que resuelvan los retos sociales a los que se enfrentan, ayudándoles a ser protagonistas de su propio desarrollo personal, laboral y educativo.
