CÁDIZ 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García, ha puesto en valor la implicación del sector privado en la transición hacia la economía circular y ha hecho un llamamiento al tejido productivo "a liderar, junto con la Administración andaluza, este proceso imprescindible para frenar los efectos del cambio climático y avanzar hacia un futuro más verde, limpio y respetuoso con el medio ambiente".
En una jornada sobre 'Responsabilidad compartida: el papel de empresas y administración en la gestión de residuos', organizada por la Confederación de Empresarios de Cádiz del sector Medio Ambiente, la consejera ha reconocido "el compromiso activo del tejido empresarial con una gestión adecuada y sostenible de los residuos" y ha insistido en los retos que enfrenta su tratamiento en España.
Según ha indicado la Junta en una nota, por este motivo ha apostado por "reforzar la responsabilidad compartida entre las empresas, grandes aliadas, y la administración, para afrontar los desafíos que plantea una correcta gestión y trazabilidad de los residuos". "Todo ello desde el compromiso con la sostenibilidad y el medio ambiente", ha añadido.
En esta línea, ha destacado el trabajo de la Junta de Andalucía para lograr una labor "más ágil, digitalizada y orientada a facilitar" al sector empresarial la puesta en marcha de las medidas necesarias para avanzar hacia una economía circular efectiva. Así, ha resaltado el impulso normativo y de planificación del Ejecutivo andaluz.
"En 2021 se aprobó el Plan Integral de Residuos de Andalucía (PIRec 2030), una hoja de ruta con metas claras de prevención, reciclaje y valorización de residuos con el objetivo de favorecer un desarrollo sostenible, competitivo y generador de empleo", ha recordado.
Además, ha remarcado la importancia de la Ley 3/2023 de Economía Circular, "una norma de referencia a nivel nacional que introduce medidas pioneras y transformadoras, como el derecho a reparar productos, el fomento del consumo responsable, la lucha activa contra la obsolescencia programada o la reducción del desperdicio alimentario". "Estas medidas, de carácter transversal, inciden directamente en los hábitos de producción y consumo, promoviendo modelos más sostenibles", ha manifestado.
Catalina García también ha señalado el nuevo Reglamento de Residuos y Economía Circular, en el que trabaja la Consejería y que incluirá medidas para simplificar los procedimientos relativos a la condición de residuo y subproducto, así como una regulación más eficaz en relación con los plásticos agrícolas.
Igualmente, ha hecho hincapié en la importancia de la Ley para la Gestión Ambiental de Andalucía (Legam), cuyo anteproyecto se encuentra en tramitación, reseñando que "establece mecanismos innovadores que favorecen la recirculación de recursos y la valorización de residuos, convirtiendo el residuo en recurso, impulsando la ecoinnovación, la eficiencia en el uso de materiales y la generación de empleo verde, lo que refuerza el compromiso de Andalucía con un modelo económico sostenible y circular".
En este contexto, ha recordado la aprobación, el pasado febrero, de la formulación de la Estrategia Andaluza para la Economía Circular, "concebida con el objetivo de optimizar el uso de los recursos y reducir al mínimo la generación de residuos". Sobre ella ha detallado que, "entre las principales novedades que presenta, figura la creación de una plataforma de simbiosis industrial que permitirá el intercambio de recursos entre empresas, centros de investigación y administraciones, fomentando procesos productivos más sostenibles".
"De este modo lo que a priori se considera un residuo puede convertirse en materia útil para otra actividad industrial, garantizando al mismo tiempo la protección ambiental y la salud pública", ha añadido. Además, ha indicado que "desde la Consejería se está promoviendo un modelo en el que los residuos se transforman en oportunidades, favoreciendo una economía circular plenamente operativa en Andalucía".
Catalina García ha defendido que "este cambio debe materializarse mediante la cooperación entre el sector público y privado, especialmente en el desarrollo de tecnologías que faciliten la conversión de residuos en recursos de valor". Además, se ha referido a la implicación de Andalucía en el proyecto europeo 'Interreg Europe Circular Minds', al que se incorporó en abril de 2024, señalando que "el objetivo principal de esta iniciativa -ha precisado- es aumentar la presencia de criterios de circularidad en las licitaciones públicas, tanto en cantidad como en calidad".
Al respecto, ha añadido que este programa "brinda la oportunidad de compartir experiencias y buenas prácticas con regiones de países como Finlandia, Suecia, Portugal o Países Bajos, con el fin de perfeccionar la aplicación de la economía circular en la contratación pública" y ha incidido en los encuentros que "mantenemos actualmente con entidades locales andaluzas para trasladarles estas experiencias y facilitar su adopción".
APOYO Y FINANCIACIÓN PARA LOS MUNICIPIOS
En relación con los residuos municipales, Catalina García ha mencionado la 'Guía de Apoyo a los Municipios para la Economía Circular', elaborada por la Junta para ayudar a los ayuntamientos a cumplir con la exigencia legal de disponer de un plan municipal de economía circular, especialmente en los municipios con más de 5.000 habitantes, tal como establece la Ley 3/2023, de 30 de marzo, de Economía Circular de Andalucía.
Según la consejera, "los ayuntamientos desempeñan un papel crucial en la gestión de residuos, pero no deben asumir en solitario la responsabilidad de esta transición". Por ello, ha subrayado el respaldo financiero de la Junta de Andalucía, que supera los 166 millones de euros, destinados a garantizar una recogida y tratamiento eficaces de los residuos municipales.
Así, entre las principales actuaciones desde 2019, ha citado el Plan de Puntos Limpios de Andalucía, que contempla una inversión de siete millones de euros para desarrollar una docena de instalaciones, con adjudicaciones ya realizadas en localidades como Camas, Chipiona, Bormujos o Jódar, y otras en ejecución como la de Mengíbar.
A esto se añade el Plan de Estaciones de Transferencia de Biorresiduos, con cuatro millones de euros, así como ayudas por valor de 45 millones para la recogida separada de biorresiduos, que se ampliarán con otros ocho millones adicionales, según ha indicado la Junta, que ha recordado que también se han destinado diez millones de euros a la adquisición de vehículos para la recogida de biorresiduos y 36 millones más para construir y adaptar instalaciones de tratamiento específicas.
Catalina García ha puesto de relieve "otra de las líneas estratégicas impulsadas por la Junta, como es el sellado y restauración de vertederos, que se enmarca en un plan global con una inversión prevista de 20 millones de euros en varios municipios andaluces, que ya se está ejecutando y que aporta soluciones definitivas a demandas históricas".
Finalmente, ha destacado que el Presupuesto de 2025 contempla un incremento del 68% en la inversión dedicada a Economía Circular y gestión de residuos, alcanzando los 137,97 millones de euros. "Este Gobierno ha asumido con seriedad el reto ambiental y entiende que la adecuada gestión de los residuos es clave para avanzar hacia un modelo verdaderamente sostenible", ha asegurado.