JEREZ DE LA FRONTERA (CÁDIZ), 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Pleno del Ayuntamiento de Jerez de la Frontera (Cádiz) aprobó hoy los presupuestos para 2010, el Plan de Viabilidad y las ordenanzas fiscales, además del Reglamento Orgánico Municipal y la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para devolver la calificación industrial al suelo de la fábrica de botellas.
El portavoz del Gobierno local, Casto Sánchez, destacó que el presupuesto "está caracterizado por la austeridad interna, el compromiso social, la fiscalidad responsable y la capacidad inversora" y añadió que "todo ello desde el cumplimiento de los compromisos municipales, el mantenimiento de los servicios públicos, el pago a la plantilla y a proveedores, y la estabilidad económica en el funcionamiento de la propia Administración local".
Además, señaló que "son los primeros presupuestos del Plan de Viabilidad Municipal, un documento que deberá estabilizar a corto plazo las cuentas municipales, superando las causas que generan un déficit endémico que, con el paso de los años, ha llegado a amenazar no sólo la respuesta a los compromisos con la ciudadanía, la plantilla y los proveedores, sino la propia normalidad de la Institución".
En cuanto al Plan de Viabilidad, Sánchez manifestó que es "uno de los documentos más importantes que este Gobierno ha elaborado y que pretende conseguir la estabilidad económico financiera de la hacienda municipal de Jerez, mediante una profunda reforma de la política económica y un ajuste en los recursos y servicios que, en todo caso, asegure su prestación de forma sostenible, respetando criterios de suficiencia, calidad y equidad".
Según explicó el portavoz del equipo de gobierno, los principales objetivos que se marca el Plan son asegurar la viabilidad financiera de la institución, en un escenario económico inmediato de crisis y de recuperación de la actividad a medio plazo, bajo un enfoque realista de la capacidad del Municipio y de la Hacienda Local para obtener o generar recursos corrientes.
Además, pretende conseguir el equilibrio financiero de forma progresiva, considerando un periodo sostenido de recuperación de las finanzas municipales similar al que ha originado la situación actual y asegurar la continuidad en la prestación de todos los servicios básicos para la población, tanto en cobertura como en niveles de prestación, de acuerdo con las competencias y normativa de régimen local y garantizando, en todo caso, la equidad y la eficacia de las políticas públicas.
