Tribunales.- La defensa de los acusados de agredir a cuatro policías nacionales eleva mañana pruebas al juez

Actualizado: miércoles, 4 marzo 2009 20:11

HUELVA, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

El abogado de los cuatro acusados de propinar el pasado domingo una paliza a seis agentes de la Policía Nacional en la calle Gonzalo de Berceo de la barriada onubense de la Orden presentará mañana ante el juez pruebas testificales y fotográficas a favor de sus clientes, después de que ayer el Juzgado de Instrucción número 4 de la Audiencia Provincial de Huelva decretara prisión preventiva para estos cuatro imputados.

Así lo explicó a Europa Press este letrado, Ángel Llamas, quien aseguró que posee en su poder una serie de fotografías y en concreto "tres flashes de la detención en la que no se ve agresión por parte de los detenidos". Por otro lado, el abogado defensor apuntó que dos testigos de los hechos están dispuestos a atestiguar ante el juez. Los delitos por los que se les imputan son los de atentado contra agentes de la autoridad y contra el orden público, lesiones y daños con medios peligrosos a los agentes y a vehículos oficiales y, a uno de los detenidos, se le atribuye a su vez un delito de resistencia a la autoridad.

Por su parte, el comisario principal jefe provincial, Miguel Rodríguez Durán, subrayó ayer en rueda de prensa que el matrimonio, no tiene antecedentes penales, pero sus dos hijos, sí cuentan con antecedentes, siendo todos ellos vecinos de la calle Gonzalo de Berceo.

Esta misma mañana, Rodríguez Durán indicó que tres personas más, mayores de edad y con antecedentes policiales, han sido detenidas por su presunta relación con estas agresiones a los agentes el pasado domingo.

Los hechos se desencadenaron cuando a las 12,30 horas del pasado domingo dos de estos agentes patrullaban por la citada calle y, tras observar a dos personas que les resultaron "sospechosas", les pidieron que se identificaran. Tras comprobar que los dos eran hermanos y uno de ellos era menor, el mayor de edad salió corriendo huyendo de los agentes.

En ese momento, uno de ellos lo alcanzó y procedió a tumbarle en el suelo para interceptarlo, momento en el que empezó a salir gente --unas 80 personas-- de las viviendas de la zona armados con palos, piedras y bates de béisbol para atacar a los agentes.