El Ayuntamiento de Málaga y la Junta piden celeridad a la empresa encargada de estos trabajos
MÁLAGA, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Real Cuerpo de Bomberos de Málaga ha recibido a causa de las últimas lluvias centenares de llamadas pidiendo su intervención de los vecinos de la zona de Nuevo San Andrés cuyas viviendas se vieron afectadas por el tornado del pasado 1 de febrero. Asimismo, al mediodía de hoy, en torno a 150 de estas personas, según la Policía Local, cortaron el tráfico durante una hora en la avenida de Europa exigiendo que se actúe para reparar las cubiertas.
La concejala de Bienestar Social del Ayuntamiento de Málaga, María Victoria Romero, señaló que, de momento, un total de 60 familias han sido desalojadas de sus viviendas a causa de los daños provocados por la lluvia.
Así, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, subrayó en rueda de prensa que "si sigue lloviendo este problema se mantendrá hasta que no estén reparadas las cubiertas". Explicó que "aun queda mucho por hacer", ya que sólo han sido sustituidas el 10 por ciento de las cubiertas dañadas, y destacó que "si todo va bien y el tiempo lo permite, la reparación estará terminada en dos meses aproximadamente".
"Los bomberos están quitando bolsas de agua que se han formado por la lluvia y cuyo peso puede provocar el derrumbe de las cubiertas", manifestó De la Torre, al tiempo que admitió que "es una situación muy molesta e insegura para los vecinos".
El primer edil resaltó la necesidad de que el Consorcio de Seguros, la empresa encargada de los trabajos de reparación y las compañías aseguradoras "hagan su trabajo cuanto antes, porque lo importante es que las cubiertas estén reparadas lo antes posible y de forma correcta".
Manifestó que el Consorcio debe ser "flexible y práctico" y hacer una reparación "correcta" de las cubiertas. "Si una cubierta está muy dañada y no basta con una reparación parcial, habrá que cambiarla entera para dar mayor garantía a los vecinos", agregó.
El alcalde recordó que "la situación es compleja", debido a que depende de tres organismos diferentes --Consorcio de Seguros, Ayuntamiento y Junta de Andalucía-- y a que "se ha tardado en conseguir el material correspondiente".
Además, recalcó que las lonas que el Consorcio de Seguros puso como cubiertas provisionales han funcionado "regular", ya que "la lluvia provoca que el agua cale a través de la tela". "Entiendo la situación de preocupación de los vecinos", señaló, aunque concretó que "tengo la tranquilidad de que el personal del Distrito, de las empresas contratadas por las propias comunidades de propietarios, así como el personal de Urbanismo y los bomberos están haciendo todo lo posible", concluyó.
JUNTA
Por su parte, la delegada del Gobierno andaluz en Málaga, María Gámez, pidió también "celeridad" a la empresa encargada del arreglo de las cubiertas afectadas, así como que se adopten "medidas preventivas efectivas" ante la posibilidad de que prosigan las lluvias.
Gámez dirigió esta mañana un escrito a la empresa para que "acelere" la culminación de las mismas, dado que la Junta de Andalucía, a través de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (EPSA), ha asumido el coste del arreglo de 16 de las 59 cubiertas dañadas por el vendaval, que quedaron fuera de la cobertura del Consorcio de Compensación de Seguros.
La delegada lamentó en un comunicado que "la empresa no haya adoptado las medidas necesarias ante los avisos de lluvias existentes para la provincia, como ha demostrado la entrada de agua en diferentes viviendas", e instó a que "no se repitan estas situaciones y se tengan en cuenta los mecanismos oportunos para evitar nuevas filtraciones".
Los trabajos que financia la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio, a través de EPSA, se centran en cuatro edificios, tres situados en la calle Cancho Pérez y uno en Hoyo Higuerón. En dos de ellos, ya han comenzado las obras, pero en los otros dos "todavía no han podido empezar al no haber recibido los permisos de tráfico necesarios para poder trabajar en la zona".
