MÁLAGA, 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los sindicatos CCOO y UGT calificaron de "tomadura de pelo" el anuncio del Ministerio de Fomento de invertir 700 millones de euros en obras públicas e infraestructuras, partida que se incluirá en los Presupuestos Generales del Estado de 2011, porque "no tienen carácter social", según el secretario general de la Federación de Comercio, Hostelería y Turismo de CCOO a nivel estatal, Javier González.
El líder sindical criticó que los 700 millones se dan "a una política antisocial", en vez de destinarlo "a recuperar la congelación de las pensiones o a los sueldos que se ha quitado a los funcionarios", y añadió que "la anulación de la inversión de 6.400 millones de euros suponían 110.000 puestos de trabajo menos" mientras que "la aplicación de 700 millones van a suponer sólo 8.000 puestos de trabajo repartidos entre las obras de Andalucía y Cataluña".
"El reinicio de las obras en Málaga va a ser positivo", indicó González en la rueda de prensa convocada con motivo de la asamblea de representantes sindicales que se celebró en la provincia, aunque matizó que no entiende "por qué no se destina ese dinero a otras cosas más apremiantes", ya que "los grandes beneficiados serán los empresarios de las obras", que en Málaga se centran en el tercer carril de la Ronda Este, el acceso sur al aeropuerto, la Segunda Ronda y el soterramiento de la vía de San Pedro de Alcántara.
Asimismo, apuntó que dicha inversión se hace a causa de "la presión que ejercen los constructores sobre el Gobierno", y que son medidas "electorales y electoralistas", ya que "el 43 por ciento de la obra de los 700 millones va, casualmente, a Andalucía y a Cataluña".
LA REFORMA EN EL SECTOR DEL COMERCIO
Por otra parte, González señaló que la reforma laboral "afecta a todos los trabajadores de España, pero especialmente a la hostelería y el comercio", ya que "son sectores precarios y con salarios muy bajos".
"Nos estamos jugando el futuro de la mayor industria de este país, el Turismo", afirmó González, pues en este sector "hay mano de obra intensiva, se ha hecho un esfuerzo por mejorar la calidad de los servicios que se están prestando, y somos un país competitivo".
El líder sindical señaló que, a nivel nacional, la reforma laboral del Gobierno afecta a cerca de dos millones de trabajadores en el sector del comercio, y que desde que empezó la crisis los grandes almacenes llevan despedidos o no contratados a 86.000 personas.
Por otra parte, el secretario general de la Federación de Comercio, Hostelería, Turismo y Juego de UGT a nivel estatal, Francisco Domínguez señaló que la huelga del 29 de septiembre "será el principio, no el final de las manifestaciones sindicales" si no hay "una representación patronal que nos garantice que está por el diálogo social".
