Condenado por amenazar a vecinos con causarles daño si no le daban dinero

MÁLAGA, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -

   La Audiencia de Málaga ha condenado a nueve años y siete meses de prisión a un hombre por amenazar a vecinos de la capital malagueña con causarles males a ellos y a sus familiares si no le entregaban determinadas cantidades de dinero. Además, llegó a incendiar la vivienda de un matrimonio de avanzada edad.

   Los hechos sucedieron en 2014. El procesado, según la sentencia a la que ha tenido acceso Europa Press, con el fin de "incrementar ilícitamente su patrimonio y con la intención de causar temor", redactó y envió notas anóminas a varios vecinos de una calle de la capital.

   En dichas cartas, les exigía, señala la resolución, la entrega de dinero "conminándoles con causarles males a ellos y a sus familiares en caso de no ceder a dicha petición". Así, remitió al menos a tres personas varias notas, en las que les decía, además, que les observaban y controlaba y que no llamaran a la Policía.

   Los destinatarios de estas notas sufrieron, según se declara probado, "notable desasosiego, inquietud y zozobra de ánimo", aunque ninguno de ellos llegó a entregar cantidad económica alguna, siguiendo las indicaciones de la Policía, a la que habían denunciado estos hechos.

   Asimismo, el acusado, para "incrementar el temor a los destinatarios de las notas anónimas, al no someterse a sus exigencias", fue a la casa de un matrimonio de avanzada edad --tenían 85 años--, a los que también había mandado notas y, sabiendo que estaban dentro, "arrojó en la parte trasera un par de botes de gasolina con unos trapos ardiendo".

   Esto provocó que ardieran varias vigas de madera que había y hojarasca seca, ocasionando un humo intenso que entró en la casa, sin que el fuego llegara a extenderse dentro. El matrimonio, ignorantes del fuego creado, fueron sobresaltados por los bomberos y lograron salir sin sufrir lesiones.

   Previamente a ser formalmente detenido, dijo a los agentes que él redactó y envió las notas y fue autor del incendio. Asimismo, antes del juicio, ingresó los 939 euros de los desperfectos en la casa del matrimonio. Por estas dos cosas, se aprecia las circunstancias de rebajan la pena de confesión y reparación del daño.

   Se le condena por un delito de amenazas condicionales de mal y por otro de incendio. Además de la pena de prisión, se le impone que indemnice a uno de los perjudicados con 1.000 euros, a otro con 4.000 y al matrimonio con 16.000 euros, a los que se le entregará, además, el dinero consignado por los daños materiales.

   La defensa cuestionó que el acusado llegara a amenazar a los perjudicados, para lo que se basó en la redacción "burda y tosca" de los anónimos y en la falta de concreción del posible perjuicio. Pero la Sala rechaza este argumento, apuntando que la gravedad de la amenaza no depende de la literalidad de la expresión utilizada.

   Al respecto, señala que las notas remitidas por el procesado asustaron a los denunciantes, "privándoles de tranquilidad y sosiego, haciéndoles vivir en un estado de inquietud permanente". Asimismo, el Tribunal incide en que el comportamiento del acusado fue "persistente en el tiempo".

   Sobre el incendio, la Audiencia dice que el acusado conocía las características de la finca y que sabía que en el lugar donde arrojó los botes de gasolina había los objetos que ardieron y estaba bajo una ventana de la casa. Así, aunque se considera que existió peligro para la vida, éste fue de entidad menor.