MÁLAGA, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
El jefe de la Demarcación de Costas Andalucía-Mediterráneo en Málaga, Francisco Javier Hermoso, aseguró hoy que la intención del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino no es demoler las viviendas situadas en las antiguas playas de El Palo, Pedregalejo, Las Acacias, El Dedo y La Araña; de hecho, hizo hincapié en que "no hay abierto ningún expediente de derribo", siendo su objetivo consensuar una solución legal con el Ayuntamiento y la Junta.
Hermoso abogó por ser "coherentes", ya que "es un tema que lleva muchos años enquistado y al que nunca se le ha encontrado una solución porque a lo mejor no ha habido una coordinación entre todas las administraciones".
Insistió, en declaraciones a Europa Press, en que "no tenemos entre nuestros planteamientos ningún plan de derribo masivo", al tiempo que dejó claro que "el Ministerio de Medio Ambiente no va a acometer ninguna actuación de forma unilateral".
Por tanto, apostó por que haya "una coordinación entre todas las administraciones" para solucionar "la situación de estas viviendas, que no están dentro de la ordenación", de forma que cada institución plantee "mecanismos que sean factibles".
El responsable de la Demarcación de Costas reconoció que "no podemos cerrar los ojos" ante el problema de estas casas, motivo por el cual planteó "una solución dentro de la legalidad y que sea definitiva".
Hasta el momento, dijo que desde su departamento se han barajado "todas las posibilidades, pero ninguna concreta ni definitiva", ya que la solución "tiene que venir de la mano de todas las administraciones". "Todos debemos poner de nuestra parte", apostilló.
Preguntado por el hecho de que en el último informe sectorial de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar sobre el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Málaga, con fecha 24 de julio, se hable de la "erradicación" de las edificaciones ubicadas en dominio público marítimo-terrestre, Hermoso señaló que el significado es más de "erradicación del problema", ya que la intención del Ministerio es "liberar espacio, pero en ningún caso demoler".
