El ex teniente fiscal apunta como uno de los retos de la Fiscalía el contar con más funcionarios

Europa Press Andalucía
Actualizado: sábado, 25 febrero 2012 13:11
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MÁLAGA, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -

   El hasta esta semana teniente fiscal de Málaga, Manuel Villén, ha asegurado que uno de los retos pendientes que tiene la Fiscalía de Málaga es contar con un mayor número de funcionarios y ha considerado que es "muy urgente el aumento de la plantilla, no sólo porque cuantitativamente la actividad del ministerio fiscal ha aumentado, sino también por los cambios cualitativos".

   En este sentido, ha explicado que "paradógicamente desde el año 93 o 94 la plantilla no ha variado", lo que, ha indicado, "no es que sea igual, pero sólo ha aumentado exclusivamente por la atribución a la Fiscalía de nuevas funciones, como es materia de menores o por la nueva distribución territorial, pero la plantilla en Málaga en principio no ha cambiado".

   Villén, que en julio haría 16 años que llegó a Málaga, siendo primero fiscal jefe, y que esta semana se ha jubilado, ha asegurado que otro paso que debe dar la Fiscalía es "consolidar" las secciones o especializaciones existentes y tienen que "reafirmar sus propios registros y deben tener apoyos", sobre todo en algunas materias "delicadas" como es Anticorrupción.

   Al respecto, el ya ex teniente fiscal ha asegurado, en declaraciones a Europa Press, que esta fiscalía especializada de Anticorrupción debería contar con "apoyo de otros profesionales en materia de Hacienda, técnicos contables y Policía Judicial que esté adscrita", algo que podría "predicarse de otras secciones" o especialidades del ministerio público.

   Sobre los cambios experimentados en la Fiscalía de Málaga en los años que ha formado parte de ella, ha dicho que ha habido "muchos", empezando por las instalaciones, con el cambio de la sede de los juzgados desde el Palacio de Miramar a la Ciudad de la Justicia, donde las dependencias "son más dignas, aunque no conseguí mi propósito de que cada uno tuviese su despacho".

   También ha habido cambios en la plantilla de fiscales, "que prácticamente se ha doblado, porque cuando llegué había unos 50 y actualmente somos unos 95 fiscales, si contamos las secciones territoriales y las fiscalías de áreas", ha señalado el hasta ahora teniente fiscal, quien ha destacado la creación de las secciones especializadas en determinadas materias.

   También existe una nueva estructura de la Fiscalía, porque, según ha explicado, entonces había un fiscal jefe, un teniente fiscal y fiscales, junto a dos adscripciones permanente en Melilla y Marbella; "mientras que en la actualidad esas dos adscripciones son órganos distintos de área y hay secciones territoriales en Fuengirola, en Vélez-Málaga y en Torremolinos".

   Uno de los casos que ha recordado y en el que estuvo como representante de la Fiscalía de Málaga fue el de Parcemasa, sobre el supuesto fraude de incineraciones en el Parque Cementerio de Málaga, celebrado en 2004 en la Sección Primera de la Audiencia. Ha dicho que se lo atribuyó "por la repercusión que tuvo en su momento", según ha asegurado.

   Al respecto, Villén ha destacado que en ese caso "se tocaba algo tan íntimo como el respeto a los difuntos de las víctimas" y ha señalado que ese juicio se desarrolló durante tres o cuatro meses y "no había asistido hasta entonces a un macrojuicio, porque no había vistas orales de esas características".

   También ha apuntado a otros casos "importantes" como el asunto Interlhorce "cuando llegué" o los asesinatos de Rocío Waninkhof y Sonia Carabante, en los que no asistió al juicio, pero sí estuvo "pendiente de los mismos y marcando algunas directrices, aunque con respecto absoluto a los fiscales que se encargaron de ellos".

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