Señala la necesidad de generar empleo productivo y para ello apunta que no deberían aumentar los costes sociales, fiscales o financieros
MÁLAGA, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -
El empresario Juan Jiménez de Aguilar aseguró hoy que una reforma laboral por sí sola no es suficiente para salir de la crisis pues, según especificó, "por muy intensa que sea, no crea empleo, el empleo lo crea los empresarios cuando tiene un entorno fiscal, financiero, de mano de obra bien formada y de infraestructura favorable". "Un empresario decide invertir si tiene un mercado laboral adecuado pero, sobre todo, si tiene un entorno del conjunto que le permita que sus negocios vayan bien en el futuro", aseveró.
Jiménez de Aguilar, indicó durante el primer desayuno coloquio Encuentros Málaga Económica Siglo XXI', organizado por el PP, que ello tiene que ir acompañado "de unas administraciones públicas que no sean jamás un obstáculo a salvar, sino el mejor colaborador de la empresa". Además, apuntó que estas instituciones "no están a la altura de las circunstancias del resto del país, el cual ha avanzado muchísimo más que éstas".
En este sentido, puso como ejemplo el caso de la Administración de Justicia, ya que, según explicó, las decisiones judiciales en materia económica "se eternizan y, a veces, hacen inviable empresas que, habiéndose resuelto un problema jurídico a tiempo, no habrían tenido porqué cerrar su actividad".
Manifestó que "con una receta de este tipo, seguro que salimos de nuevo, aunque la meta no está cerca y quedan bastantes puertos que subir", ya que, según afirmó, "estamos en un proceso de desconfianza general que hace que aumente el ahorro y disminuya el consumo" porque la gente "considera que su ahorro le garantiza, dentro de lo posible, un futuro mejor". En este sentido, apuntó que "devolverle la confianza a los mercados financieros dependen de que todos los anuncios --propuestas-- que se hagan, se cumplan en su propia extensión".
Asimismo, apostilló que también estamos en un proceso "pleno" de globalización de la economía, que es "irreversible"; de endeudamiento sin precedentes de la deuda pública, de empresas y particulares; de fuerte crisis de empleo, cuyos costos de prestaciones "pesan como una losa sobre los presupuestos"; y en un proceso de enorme desequilibrio en las cuentas públicas, donde los ingresos son casi la mitad de los gastos comprometidos, de ahí, aseguró, el llamado proceso de recortes.
Para acabar con esta situación, el ex presidente nacional de la Confederación Española de Pequeñas y Medianas Empresas (Cepyme) subrayó la necesidad de fomentar el empleo productivo y para ello es fundamental que no se produzcan incrementos de costes sociales, fiscales ni financieros y que se registre un incremento de la competitividad a través de la formación permanente y continua, ya que "la inversión productiva permite ir a los mercados internacionales en condiciones de competir", puntualizó.
Además, afirmó que para que pueda seguir habiendo empleo productivo es "absolutamente imprescindible" la fluidez del crédito, para empresas y particulares, en una doble vertiente: ayudando a las empresas viables a salir de la crisis y apoyando las nuevas iniciativas "por pequeñas que sean".
Jiménez de Aguilar declaró que la mejor manera para alcanzar la reforma laboral sería un acuerdo entre los agentes sociales, aunque señaló que este acuerdo "está distante porque las posiciones son encontradas y difíciles de compatibilizar".
