Málaga.- Julián Muñoz pide "auxilio y amparo" porque se le está juzgando y no tiene beneficios por la relevancia pública

MÁLAGA, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -

El ex alcalde de Marbella (Málaga) Julián Muñoz pidió hoy "auxilio, amparo e, incluso, lástima si es necesario" al juez que lo juzga por un delito urbanístico, al asegurar que no tiene los mismos beneficios penitenciarios que el resto de los ex concejales marbellíes acusados, debido a su relevancia pública. Además, añadió que "me da pena que se nos esté juzgando por esa relevancia".

Muñoz, en su derecho a la última palabra ante el titular del Juzgado de lo Penal número 7 de Málaga, achacó esa relevancia a que es una persona "mediática, que estoy todos los días en la prensa", y a que "he tenido la suerte de conocer a una persona con la que estoy muy bien", en referencia supuestamente a la cantante Isabel Pantoja.

Pero, en su opinión, esta notoriedad social es la causa de que no se le hayan dado permisos ni se le haya concedido el tercer grado, como al resto de los ex ediles condenados, sino el segundo. "Si no tuviera la relevancia, estaría igual que ellos, en tercer grado o en libertad", apuntó el ex regidor, quien añadió que "no se trata del número de delitos porque ellos tienen casi las mismas condenas y causas pendientes que yo".

"Lo que se está haciendo conmigo no se hace con ningún ser humano, sea culpable o inocente", aseguró Muñoz, quien apuntó: "Tengo miedo, tengo pánico". Asimismo, dijo sentirse "en la mitad de ningún sitio, perdiendo el arraigo familiar y económico" y se quejó de que "no me dan mi derecho a estar en el centro penitenciario más cercano a mi familia, a mis hijas, a mi compañera".

A este respecto, también precisó que Instituciones Penitenciarias, que le ha concedido la clasificación como preso de segundo grado, "habla de hechos delictivos de la misma naturaleza", por lo que criticó que "estimen la conexidad" en este sentido "y no para la acumulación de causas", asegurando que por esto siente "indefensión jurídica, judicial y penitenciaria".

Se dirigió a los abogados y afirmó verlos "desesperados", al igual que él cuando "estoy en la celda, entre cuatro paredes y pensando que nunca nadie me va a creer". A éstos y al resto de ex concejales acusados les dijo que "ponga la sentencia que ponga el juez, el fiscal la recurrirá, recaerá en la Sección Segunda de la Audiencia y nos condenará, como ocurrió con la sentencia de Penal 2". "Que estamos condenados", espetó.

Aseguró que cuando era cargo público "no tenía consciencia de estar cometiendo un delito" y añadió que cuando se está en la cárcel "la vida se ve desde otro punto de vista". "Creen que sería tan tonto para seguir declarando lo mismo que antes, después de estar ya 17 meses en la cárcel", preguntó.

DECLARACIÓN.

El fiscal mantuvo la petición de 18 meses de prisión y ocho años de inhabilitación para Muñoz y otros cinco ex concejales, integrantes de la comisión de gobierno de 27 de marzo de 1998 en la que se "decidió conceder licencia de obra por la que se las autorizaba para construir" en suelo calificado como zona deportiva de uso público, según el Plan General de Ordenación Urbana de 1968 y de 1986.

En su declaración, aseguró que en la cárcel ha aprendido de urbanismo y reiteró que el secretario municipal era el que decía el sentido de los informes. Así, aseguró que confiaba en los técnicos "igual que la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo", en los expedientes para su clasificación penitenciaria.

Explicó que cuando fue alcalde "se sentó con la Junta de Andalucía" para dialogar sobre el urbanismo en Marbella y mantuvo una entrevista con la responsable de Ordenación del Territorio, Josefina Cruz, y el delegado provincial de Obras Públicas, José María Ruiz Povedano, en la que "se me dijo, vamos a sacar esto adelante, pero la Gerencia de Urbanismo tiene que desaparecer y lo hice". "La respuesta fue una moción de censura", que calificó de "malvada".

El resto de ex ediles acusados que tenían que declarar hoy, Mario Jiménez, Marisa Alcalá y Dolores Zurdo, coincidieron en que no sabían en ese momento que existía controversia sobre el urbanismo. La última se mostró segura de que no estuvo presente en la comisión de gobierno donde se aprobó la licencia.