MÁLAGA, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Málaga, PSOE e IU, aunque no se oponen a estudiar un posible cambio de fecha de la Feria, del mes de agosto a septiembre, han afirmado que hay otras cuestiones relativas a estos festejos que requieren una atención más inmediata. Así, esperan que este debate, abierto por el concejal de Cultura, Damián Caneda, "no sea una especie de cortina de humo para no ver los déficit que presenta".
De este modo se ha pronunciado la portavoz socialista, María Gámez, quien ha hecho hincapié en que "hay muchas otras cuestiones sobre la Feria de Málaga que repensar que meramente el cambio de fecha".
"Hay muchas cosas que debatir sobre el modelo actual de la Feria, como que haya más iniciativas culturales, tenerla más ordenada, que sea mejor para la convivencia, mejor desde el punto de vista de la limpieza o, incluso, extender la del centro y que llegue a la zona de La Malagueta", ha señalado.
Como ha resaltado a Europa Press la concejala del PSOE, "es mucho más importante qué imagen se lleva el que viene a vivir la Feria", de manera que "repita, que es la cuestión".
Sobre el cambio de fecha en sí, no se ha opuesto: "si existe la posibilidad de que desde un punto de vista económico y social pudiera funcionar mejor en otro mes del año, cosa que ahora es difícil de imaginar --ha reconocido--, por qué no estudiarla".
No obstante, ha subrayado que cualquier decisión que se adoptase debería contar con "unas garantías económicas y sociales fundamentadas" y, especialmente, tener "la unanimidad de todos aquellos sectores que tienen que ver con la Feria".
IZQUIERDA UNIDA
Por su parte, el portavoz de IU, Pedro Moreno Brenes, ha coincidido con Gámez en que, "inicialmente, los debates no me parecen mal", pero antes que el posible traslado a septiembre, "hay cuestiones que habría que abordar ya para mejorar la Feria". Más aún, ha dejado claro que "no he percibido en la calle el debate del cambio de fecha".
Para el caso concreto de trasladar a otro mes la Feria, ha declarado que serían necesarios "un estudio profundo y riguroso, con razones turísticas que avalen ese cambio", y, además, "el consenso de la sociedad malagueña".
A su juicio, adoptar una decisión sin contar con alguno de estos dos elementos sería "temerario". "Los temas no son intocables, pero tampoco se pueden tomar decisiones precipitadas", ha manifestado a Europa Press el representante de la coalición de izquierdas.
Moreno Brenes ha precisado, no obstante, que, "en general, un mayor número de ciudadanos tienen vacaciones en agosto, tanto los que vienen de fuera como los propios malagueños, mientras que en septiembre se inicia la actividad escolar y docente y la mayor parte de la población ya está de nuevo trabajando".
