Insiste en que hay que priorizar la resolución de los problemas de seguridad del edificio
MÁLAGA, 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha reconocido este viernes que el Ayuntamiento ha dado desde principios de 2012, cuando terminó la vigencia del protocolo de intenciones, una cobertura "de hecho y no legal" a los colectivos que gestionan La Casa Invisible para la realización de actividades culturales y sociales.
Pese a ello, ha insistido en que la prioridad ahora ha de ser resolver los problemas de seguridad, que han llevado al Ayuntamiento al cierre cautelar del edificio, situado en la calle Nosquera, para actividades de pública concurrencia.
Preguntado por qué el Consistorio no ha actuado antes en este inmueble, de titularidad municipal, si ya había acabado la vigencia de ese protocolo de intenciones y teniendo en cuenta que técnicos de la Gerencia de Urbanismo advirtieron de la necesidad de acometer una rehabilitación urgente en el caso de desarrollar actividades de libre concurrencia, ha precisado que "se plantea ahora el tema de la seguridad por la queja de vecinos colindantes", al tiempo que ha defendido que "el Ayuntamiento ha tenido una posición de facilitar las actividades culturales".
Además, el regidor malagueño ha hecho hincapié en que el Ayuntamiento puede dar una cobertura "por un tiempo, pero no por años y décadas, eso ya tiene cierta enjundia".
"Lo primero es el problema de seguridad --ha aseverado-- y hay que ver cómo atender ese tema y, de cara al futuro, ya veremos cuál es la fórmula mejor", recordando la convocatoria de un concurso público para la gestión cultural y social de este inmueble.
CONCURSO PÚBLICO
De todos modos, se ha mostrado cauto al respecto y ha considerado oportuno esperar para ver si la fórmula del concurso es la más idónea y cómo plantearlo: "prefiero que ese tema esté estudiado para no entrar en la improvisación y que tenga la seguridad de los informes jurídicos y de los altos funcionarios del Ayuntamiento".
Y es que, ha incidido el regidor malagueño, en su momento "ya hubo voces de colectivos que consideraron discutible la decisión de entrega de un edificio municipal a una fundación sin concurso previo".
Más aún, ha aludido a los problemas jurídicos que se plantearon a la hora de firmar un convenio debido a la transmisión directa de un bien municipal a un grupo cuyo origen se encontraba al margen de la legalidad, abogándose entonces como salida por la convocatoria de un concurso para la gestión de ese espacio.
En cuanto a la relación mantenida durante estos años entre la Fundación de los Comunes y el Ayuntamiento, De la Torre ha apuntado que "entendía que el Área de Cultura mantenía reuniones fluidas y frecuentes para que ese diálogo estuviera atendido". "Veremos los antecedentes", ha apostillado.
El protocolo de intenciones para encauzar la legalización del proyecto de La Casa Invisible, inmueble okupado desde 2007, se firmó en enero de 2011 con una vigencia de un año.
Tras pasar ese plazo, en marzo de 2012 La Invisible y el Ayuntamiento ultimaron los términos de un convenio de adjudicación directa a la Fundación de los Comunes, que, sin embargo, no llegó a suscribirse.
El Ayuntamiento de Málaga procedió el pasado 23 de diciembre al cierre cautelar de La Casa Invisible para actividades de pública concurrencia aludiendo a motivos de seguridad. En concreto, se advertía de un estado de la instalación eléctrica "insuficiente" y "precario" y de que no existen las mínimas medidas de protección contra incendios.
Una decisión que ha sido muy criticada y ante la que los colectivos culturales y sociales que integran La Casa Invisible han acordado convocar una manifestación por el centro para el próximo 10 de enero. El objetivo es exigir al Consistorio la cesión para uso ciudadano del inmueble, así como su rehabilitación.
