Un acusado de intentar matar a su pareja con una daga dice que intentaba defenderse de ella

Actualizado: martes, 21 septiembre 2010 15:20

CÓRDOBA, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -

El procesado J.G.G., acusado de haber intentado matar con una daga a su pareja sentimental, se ha declarado inocente durante la celebración de la vista oral y ha afirmado que sólo intentó defenderse de ella porque estaba "muy histérica y agresiva, ya que no se había tomado la medicación".

Durante el juicio, J.G.G. ha contado que el cuchillo que él llevaba escondido se lo quitó a ella y ha negado que utilizara la daga contra ella, afirmando que tan sólo se lo quitó y lo guardó. En cuanto a las heridas que presentaba la mujer en el abdomen y en la espalda, el procesado ha señalado que ella se autolesionaba y las heridas podrían haber sido además de la caída que sufrió por unas escaleras.

Según la calificación del ministerio público, los hechos ocurrieron el 20 de septiembre de 2008 cuando el procesado mantuvo una discusión con su pareja sentimental en la localidad de Pozoblanco (Córdoba) y tras la disputa la arrastró por el suelo, le mordió en la nariz y en la barbilla y le clavó una daga en el cuello "con intención de matarla".

Además, la hija menor de la perjudicada, al intentar acudir en defensa de su madre, fue igualmente agredida por el acusado, golpeándole en la cara. Posteriormente, cuando miembros de la Guardia Civil trataban de detener a J.G.G., éste reaccionó de forma agresiva y golpeó a uno de los agentes que intentaban reducirlo. También amenazó con matarlos si no les quitaban los grilletes.

Al respecto, el encartado ha manifestado que el día de los hechos estaba bebido y tomó tranquimazín, si bien ha asegurado que a la niña no le puso la mano encima y no recuerda haber agredido a los agentes, ni haberlos amenazado de muerte en el momento de la detención.

El fiscal pedía para el acusado en su calificación provisional una pena de siete años y seis meses de cárcel por un delito de intento de homicidio, una pena de un año de cárcel por un delito de maltrato en el ámbito familiar y una pena de 18 meses de prisión por un delito de atentado. Por su parte, la defensa pedía la libre absolución.

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