JAÉN, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía ha mantenido su petición de condena de 18 años y seis meses de cárcel para el hombre identificado como J.S.L. al que la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Jaén ha juzgado este martes acusado, entre otros, de cuatro delitos de abusos sexuales supuestamente cometidos en 2008 sobre otras tantas menores de edad.
Así lo ha indicado a Europa Press el abogado de la defensa del procesado, que pide su libre absolución "por falta de pruebas", al contrario que la acusación particular, que interesa para el mismo una condena similar a la del Ministerio Fiscal, si bien reclama que se le imponga una indemnización de 100.000 euros, cantidad mayor a la solicitada por aquel, que asciende a 30.000 euros.
De esta manera, el juicio ha quedado este mediodía ya visto para sentencia una vez que las distintas partes personadas en el mismo han elevado a definitivas sus conclusiones, según ha explicado el referido letrado, que ha señalado además que tras las declaraciones del procesado y las cuatro supuestas víctimas se les ha tomado testimonio como testigos, entre otros, a los padres de las dos primeras y a las madres de las segundas.
En concreto, la Fiscalía considera al acusado autor de cuatro delitos de abusos sexuales, un delito de exhibición obscena ante menores y otro de exhibición de material pornográfico supuestamente cometidos todos ellos entre los días 31 de mayo y 1 de junio de 2008.
Por el primero de los delitos de abusos sexuales pide una pena de diez años de cárcel y otra de tres por el segundo, mientras que interesa nueve meses de prisión por el delito de exhibición obscena ante menores, cuatro años por los abusos presuntamente realizados el 1 de junio de 2008 --dos por cada uno de ellos-- y una última pena de nueve meses por el supuesto de exhibición de material pornográfico.
DECLARACIONES
En su declaración ante el tribunal, el acusado --que llegó a estar en prisión provisional entre los días 10 y 23 de diciembre de 2008 por estos hechos-- ha negado haber perpetrado dichos ilícitos, y aunque ha admitido que las menores llegaron a estar en su parcela los días 31 de mayo y 1 de junio de hace seis años, ha negado haberlas "tocado" alguna vez, algo que ha tachado de "patraña"
En esta línea, ha explicado que por su parcela han pasado "muchos" pequeños para "conocer a un loro" que tenía en la misma, pero que "jamás ha tenido ningún problema con ningún niño, tampoco con esas cuatro" supuestas víctimas, al hilo de lo cual ha argumentado que su finca está "a unos metros de distancia" de las de los familiares de éstas, de modo que si las chicas "hubiesen gritado", sus padres "se habrían enterado".
Por su parte, la niña que en el momento de los hechos tenía ocho años sí ha indicado que el procesado "le tocó el pecho y sus partes íntimas", así como le pidió que le hiciera "una felación" que supuestamente se llevó a cabo, a pesar de que ella "le dijo que no", además de realizarle insinuaciones lascivas.
Seguidamente, la hermana de esta niña, que ahora tiene once años y entonces contaba con cinco, ha explicado por videoconferencia que el 31 de mayo de 2008 fue a casa del acusado "a ver unos peces" y él "se metió en el salón" con su hermana y "tardaron mucho" en salir de dicha habitación, en la que ella no se encontraba.
Por su parte, las otras dos chicas --primas entre sí-- que supuestamente sufrieron abusos el 1 de junio de 2008, cuando tenían 13 y 15 años de edad, han argumentado en varias ocasiones que no recordaban bien lo que sucedió aquel día por el tiempo transcurrido desde entonces.
No obstante, ambas han coincidido en señalar que el procesado les ofreció bañarse en la piscina de su parcela, a pesar de que ellas "no llevaban bañador", y que en la casa del mismo "vieron una película pornográfica", algo que ha negado el acusado.
La primera de ellas también ha indicado que "hablaron de sexo", al hilo de lo cual desde la defensa del acusado se le ha recordado que en la declaración prestada en sede judicial unos días después de lo ocurrido, en junio de 2008, ella afirmó haber ido a casa del procesado "para preguntarle cosas de sexo que les daba corte hablar con sus padres".
Ella ha afirmado "no recordar" que hubiera relatado eso, pero ha acabado por señalar que, "por lo que pone en la declaración" de hace seis años, tanto su prima como ella tienen su "parte de culpa" de lo que ocurrió.
Por su parte, la prima de esta chica, que entonces tenía 15 años, ha coincidido con la primera en relatar que el 1 de junio de 2008 estuvo en casa del procesado viendo un loro, y que éste les ofreció bañarse en su piscina, pero que ellas dijeron que no llevaban bañador.
También ha ratificado que al entrar en la casa "vieron una película pornográfica, con escenas de contenido sexual", y que "estuvieron hablando de sexo" con él, que supuestamente "efectuó tocamientos". Asimismo, ha indicado que ese mismo día, aunque "sus padres les habían pedido que no volvieran" a la casa de este hombre, ellas regresaron.
"Nos lo tomamos al principio como un juego", ha afirmado la joven, actualmente mayor de edad, que aunque "no se acuerda bien" de lo que ocurrió porque "hace tiempo", ha indicado que él les decía que "las iba a hacer mujer y les iba a quitar la virginidad", pero que éste "no las coaccionó ni amenazó", y estuvieron en su casa "con su consentimiento". Así, ha respondido de forma afirmativa cuando se le ha preguntado, por parte de la defensa del acusado, si lo que ocurrió en dicha parcela ese día fue "con su consentimiento".
