La perito que analizó recibos del Consistorio de Fuente Palmera asegura que "no había control"

Juicio al exalcalde Fuente Palmera y tres acusados más del Ayuntamiento
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 17 diciembre 2013 21:13

Retiran los cargos contra el extesorero, que queda libre, y mantienen las penas a los otros tres acusados, entre ellos el exalcalde


CÓRDOBA, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -

La perito que analizó parte de las cuentas y los recibos del Ayuntamiento de la localidad cordobesa de Fuente Palmera de la etapa del exalcalde entre 1987 y 2003, Antonio Guisado (PSOE), ha asegurado ante el juez que en los mismo "no había control ni contablemente ni fiscal", al tiempo que se ha ratificado en los expedientes sobre la fase de instrucción, que concluyen que los recibos de la denuncia superan los 100.000 euros que "no tienen reflejo en la contabilidad municipal".

Así lo ha manifestado durante su declaración en el juicio que se celebra en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Córdoba, y que ya ha quedado visto para sentencia tras elevar las partes a definitivas sus escritos y entre ellos la fiscal y las acusaciones han retirado los cargos contra el extesorero municipal, de modo que queda libre, mientras que han mantenido las penas para los otros tres acusados, entre ellos el exalcalde.

En concreto, la perito ha manifestado que los documentos sobre la contabilidad estaban "sin orden ni control" en relación al cumplimiento de la normativa a tal efecto, teniendo en cuenta que "los gastos diarios del Ayuntamiento hay que regularizarlos", según ha subrayado, al tiempo que ha precisado que "no había seguimiento contable".

Mientras, uno de los exsecretarios, que estuvo en el cargo más de dos años desde que entró en 2005, ha comentado que no recuerda la denuncia del informe sobre los recibos, ni recuerda los documentos investigados, si bien ha señalado que cuando llegó al cargo, el Ayuntamiento estaba "casi en quiebra" con imposibilidad de cobrar las nóminas con un retraso de "tres meses".

Por su parte, el exalcalde ha reconocido este miércoles que en su etapa de gobierno se pudo cometer "algún error" en el procedimiento de pagos de los recibos del Ayuntamiento, que no descarta que "tuviera alguna deficiencia", pero asegura que "el control del gasto era exhaustivo". En el juicio, además de Guisado, han comparecido la exconcejal de Hacienda, el exsecretario interventor y el extesorero, acusados de la supuesta comisión de un delito continuado de malversación de caudales públicos, tras presuntamente sacar más de 100.000 euros de las arcas municipales, para "su propio provecho económico", de manera "arbitraria y sin habilitación presupuestaria previa" con la entrega de "recibos".

Por estos hechos, el Ministerio Público solicitaba en su calificación provisional un total de siete años de prisión y 18 años de inhabilitación absoluta para cada uno de ellos, aunque ahora el extesorero ya está libre de cargos, además de ocho años de inhabilitación para el exregidor y la exedil de Hacienda por supuesta comisión de un delito continuado de prevaricación por presuntamente entregar más de 13.000 euros a "prestatarios de manera aleatoria".

PROCEDIMIENTO "REGULAR"

En concreto, el exalcalde ha declarado que "el funcionamiento" de pagos de recibos "entendía que se hacía bien", a lo que añadió que "jamás ha faltado una peseta" y aseveró que desconoce "por qué" parte de las órdenes de pagos no presentaban concepto alguno, de manera que, a su juicio, "posiblemente se estaba haciendo regular" el procedimiento, algo que achaca "al desconocimiento", aunque reitera que "el control del dinero era exhaustivo".

Asimismo, defendió que no le llamaron la atención sobre "que hubiera hecho cosas mal", y en relación a los préstamos a particulares investigados aclara que eran ayudas a "familias desestructuradas" y para ello se contaba con expedientes de la trabajadora social y se aprobaban en comisión de gobierno, según ha explicado Guisado, que ha subrayado que firmaba los mandamientos de pagos para dichas ayudas con "el expediente resuelto".

Por otra parte, el exsecretario interventor, que estuvo en el cargo desde 1986 a 2003, ha defendido que él "no tenía llave" de acceso a la caja del Ayuntamiento y cuando se requería un pago "miraba si había consignación presupuestaria", al tiempo que ha detallado que en el pueblo había "un problema endémico con el dinero", puesto que había "muchos gastos" teniendo en cuenta la población y la cantidad de aldeas y suponía "un lastre arrastrado de muchos años".

Ante esta situación, considera que se produjo "un uso abusivo" de la caja del Ayuntamiento debido, en su opinión, a "las circunstancias" del municipio. No obstante, ha subrayado que los recibos investigados son "una parte poco sustancial" de todos los recibos del Consistorio, al tiempo que ha precisado que los mismos son de gastos menores y asignaciones a grupos que se justificaban posteriormente y "no hay ninguno falso", ha apostillado.

Además, señaló que los préstamos a particulares eran "ayudas de servicios sociales", no recuerda que "se hayan dado préstamos a nadie", y dichas ayudas eran para "familias necesitadas" que para ello se contaba con informe de la asistenta social, según el testimonio del exsecretario interventor, quien ha comentado que le preocupa "este tema", pues, a su juicio, "se ha manipulado lo que han querido".