El fiscal del caso Camas acusa a los imputados de intentar "comprar" a la concejal

Actualizado: martes, 23 octubre 2012 17:39

SEVILLA, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

El fiscal ha asegurado que los cuatro acusados por el presunto intento de soborno a la concejal no adscrita del Ayuntamiento de Camas (Sevilla) Carmen Lobo intentaron "comprarla" ofreciéndole 12.000 euros en un sobre a cambio de votar favorablemente en unos determinados puntos del pleno municipal que se celebró el 13 de septiembre de 2005, hechos por los que pide para cada procesado un año y medio de cárcel y el pago de una multa de 24.000 euros.

En sus alegato previo al inicio del juicio con jurado popular en la Audiencia Provincial, el fiscal ha considerado que en este caso hay pruebas "suficientes" para acusar de un delito de cohecho a los cuatro imputados, como son el exalcalde de Camas Agustín Pavón (IU); el exconcejal del PP Antonio Fraile; el exedil del PA José del Castillo y el empresario Eusebio Gaviño.

Durante su alegato, ha defendido que se trata de un delito de cohecho porque "no se puede tomar una decisión política habiendo recibido dinero o recompensa" aunque dicha decisión sea "justa". "Eso, aunque sea justo, no se puede hacer", ya que, según ha insistido, "tomar alguna decisión política o administrativa mediando dinero se convierte en injusto", ha señalado.

"Aunque el hecho" para el que se ofrece dicha recompensa "beneficie a la comunidad, no se puede hacer una acción recibiendo dinero", ha insistido el fiscal, quien a continuación se ha referido al hecho de que los acusados "no tienen obligación de declarar ni de decir la verdad", mientras que los testigos "no pueden mentir".

En este punto, ha reconocido que tanto Lobo como su expareja y exmilitante de IU Francisco Gordo "es cierto que mantenían un enfrentamiento político, como poco con Pavón, y posiblemente con Fraile y Del Castillo", aunque no así con Gaviño, no obstante "los testigos son los testigos y tienen que intervenir como testigos", por lo que "aunque puedan estar enfrentados con los acusados, por ello no tienen por qué inventarse nada".

Tras ello, se ha referido a las grabaciones que tanto Lobo como Gordo hicieron de sus reuniones con los imputados --una grabada en agosto de 2005, donde presuntamente se planificó el soborno, y otra de 12 de septiembre de 2005, cuando el empresario entregó a Lobo un sobre con 12.000 euros--, y ha defendido que "son grabaciones que ellos realizan de una conversación, y tenían derecho a hacerlo; no estaban haciendo nada que no se pudiera hacer".

"EJERCICIO SUCIO DE LA POLÍTICA" REALIZADO POR EL PSOE

Tras defender la validez de las grabaciones --"no hay ninguna modificación, se escuchan perfectamente y son absolutamente lineales"--, el fiscal ha concluido que "no existe un hecho provocado", ya que son los acusados los que se dirigen a los principales testigos de cargo "para plantearles una recompensa por realizar una votación en un pleno".

Una vez ha concluido la intervención del fiscal, ha tomado la palabra el abogado que ejerce la acusación popular en nombre del PSOE para poner de manifiesto que, aunque a lo largo de la vista oral "se va a hablar de trampas, no se trata de una acusación caprichosa" basada en "hechos inventados".

De su lado, el abogado de Pavón, que ha empleado una pizarra para exponer su alegato, ha aseverado que a lo largo de la vista oral los miembros del jurado "van a poder ver cómo dos personas muy peculiares --Gordo y Lobo-- preparan unas pruebas para una venganza contra Pavón, detrás de la cual hay un interés político del PSOE, que hace un ejercicio sucio de la política".

"VENGANZA" HACIA PAVÓN

El letrado del exprimer edil camero ha señalado el punto de partida "común" en este caso es que en Camas "había una situación de bloqueo", pero a partir de aquí las acusaciones "dicen que hay un acuerdo entre los políticos y Gaviño para desbloquear" la misma, tras lo que "fijan un modo de hacerlo que consiste en que Gaviño contacte con Gordo para ver si puede convencer" a Carmen Lobo de manera que vote a favor en el pleno.

No obstante, el abogado ha señalado que el empresario Gaviño "tenía un proyecto para hacer un gimnasio" en Camas, pero como el Ayuntamiento estaba "bloqueado" contactó con Gordo, ya que "pensaba que si conseguía hacerlo su socio, sus proyectos no iban a tener problemas". Tras ello, Gordo contactó con su expareja Carmen Lobo "y ambos deciden que se van a vengar de Pavón, que había cortado su carrera política".

"Todo lo que ocurre después es pura representación; al contrario que el fiscal, nosotros no creemos que finjan, sino que preparan pruebas falsas", pues Gordo y Lobo "fuerzan situaciones equívocas" y utilizan a Gaviño como "un muñeco", todo ello con un único fin: "la entrega de 12.000 euros".

"AGUSTÍN, TE LA VOY A METER HASTA LOS GAVILANES"

Tras cuestionar la validez de las grabaciones y recordar que la segunda de ellas concluye con Carmen Lobo cantando "Agustín, te la voy a meter hasta los gavilanes", el letrado ha dicho que los dos principales testigos de cargo "han sido condenado por estafa procesal", vaticinando que "si intentan mentir de nuevo, puede ser que salgan condenados de este asunto".

Asimismo, se ha referido al hecho de que Lobo llevara una grabadora para grabar su reunión con Gaviño del 12 de septiembre, asegurando que este hecho "revela el carácter del que lo hace", ya que "hace falta tener frialdad y serenidad para grabar a alguien".

De su lado, el abogado de Fraile ha dicho que en este juicio "no se defiende sólo de una acusación, sino de algo más importante, el honor", aunque "todo esto ya lo ha perdido mi cliente, porque las tergiversaciones y manipulaciones han provocado una situación irreversible".

UN CASO "POLÍTICO"

Ha añadido que "estamos ante un caso eminentemente político", señalando que el caso Camas "es el último intento de la oposición desleal del PSOE para intentar quitar el gobierno de Camas" a los imputados, punto en el que ha recordado que tanto Gordo como Lobo "fueron condenados por falsedad documental y estafa, y eso hace que Pavón los expulse a ambos de IU". "Las acusaciones se caen por su propio peso y las grabaciones están manipuladas", ha concluido.

La abogada del empresario Eusebio Gaviño ha asegurado que los dos principales testigos de cargo, "por venganza, odio o resentimiento, tendieron una trampa para provocar determinadas situaciones confusas", por lo que en el juicio habrá que dilucidar si el presente caso "es un soborno o una trampa".

Para las acusaciones "resulta muy vistoso un sobre de dinero, que es la prueba mágica", pero "las cosas no son lo que parecen, sino que hay que profundizar". Ha expuesto también que tanto Gordo como Lobo fueron condenados por falsedad documental y estafa procesal "para perjudicar a otros", por lo que el jurado "debe pensar qué tipo de personas son".

La letrada ha recordado que Lobo fue expulsada de IU y del Equipo de Gobierno, por lo que "dejó de percibir una retribución económica", lo que le ha llevado a concluir que "móviles oscuros hay, y eso afecta al testimonio de las personas", y también se ha referido a la relación entre la exconcejal y Gordo, "contra el que ha presentado una denuncia por malos tratos".

La abogada ha aportado a la causa, además, una sentencia dictada a raíz de la denuncia interpuesta por Gordo contra Lobo "por haberle exigido 120.000 euros para prestar declaración en el juicio", tras lo que ha coincidido en indicar que, en este caso, ambos "provocaron situaciones e iban con la grabadora buscando la prueba", por lo que "la mala fe es evidente".

Por último, el letrado de Del Castillo ha asegurado que el caso "es una trama detrás de la que está el PSOE, el partido de la oposición entonces".

La jornada ha concluido con la audición de la grabación en torno a la reunión del 12 de septiembre entre Carmen Lobo y Gaviño, por lo que este miércoles el juicio se reanudará con la segunda de las grabaciones y la declaración de los acusados.