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La consejera dice desconocer cómo afectará al presupuesto de su departamento los ajustes del Gobierno central
SEVILLA, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
La consejera para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Micaela Navarro, no se cree que la prioridad del PP para los próximos meses sea lograr "un gran pacto sociosanitario" entre el Gobierno de la Nación, las comunidades autónomas y los ayuntamientos para mantener la Ley de Dependencia, tal y como anunció el pasado jueves el vicesecretario general de Política Regional y Local del PP y presidente del PP-A, Javier Arenas.
Así lo ha dicho este miércoles tras ser preguntada por este asunto en el tradicional desayuno informativo con la prensa que realiza la consejera con la prensa a principios de cada nuevo año. Navarro, quien ha ironizado con que esta medida "no se la cree ni él mismo" (en alusión a Arenas), ha señalado no obstante que "los pactos se ofrecen antes de tomar decisiones unilaterales como la de subir los impuestos y quitar las prestaciones".
"Si él realmente pensara que hay que hacer un pacto, cosa que yo también pienso porque en esta Ley siempre se han tomado las decisiones por consenso entre el Estado y todas las comunidades autónomas, tendría que haber empezado por ahí. Porque lo que no se puede hacer es tomar una decisión y después decir que quiere un pacto. ¿Un pacto de qué, sobre la decisión que ya ha tomado el Gobierno y que está publicada en el Boletín Oficial?. Eso no se llama pacto, se llama trágala", ha sentenciado.
Por esta razón, Navarro ha pedido a Arenas que "no entretenga" a la ciudadanía con propuestas "que no se cree ni él mismo" y que, en su lugar, "explique a las 43.000 familias andaluzas que este año 2012 no van a tener atención ni van a poder cobrar" las ayudas que le corresponderían por familiares dependientes moderados. Se refería de esta manera la consejera a la "paralización" hasta 2013 de la entrada en el Sistema Nacional de Dependencia de las personas dependientes de Grado I, nivel 2, aprobada hace días por el Ejecutivo central.
Si hace una semana la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social calculaba que serían en torno a 40.000 dependientes moderados los que no recibirían ni ayudas económicas ni prestaciones o servicios como consecuencia de esta medida, Navarro ha elevado este miércoles la cifra a 43.000 (8.000 de ellos de Sevilla) y ha vuelto a lamentar que esta medida se haya tomado sin preguntar siquiera a las comunidades autónomas, "que son las que ponen, al menos, el 50 por ciento de la financiación".
CRÍTICAS A LA REUNIÓN DE MONTORO SOLO CON CCAA DEL PP
En esta misma línea, Navarro ha criticado que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se reúna este miércoles "solo" con las 12 autonomías en las que gobierna el PP para abordar cómo penalizar a las administraciones que no cumplan con los techos de gasto y de deuda establecidos. En opinión de la consejera, "cuando se está en el Gobierno y se tienen que tomar decisiones políticas e institucionales hay que reunir a todo el mundo" porque "no se trata de una reunión de partido".
Además, ha señalado que, debido a que Montoro no se va a reunir con la consejera de Hacienda y Administraciones Públicas, Carmen Martínez Aguayo, hasta días después de la reunión con esta docena de comunidades, Andalucía no podrá "saber exactamente cuál es el recorte que el Gobierno del PP va a aplicar" y cómo afectará a la comunidad. "Obviamente si estaba previsto conceder prestaciones a 43.000 dependientes moderados en 2012 y ahora eso se ha paralizado, pues eso tendrá trascendencia, pero no hemos calculado cuánto", ha reconocido tras afirmar que hacer estas cuentas es una tarea "muy difícil" porque influyen muchos factores, entre ellos el tipo de ayuda o prestación y la fecha en la que la persona tiene derecho a ella desde que la solicita.
Pese a ello, la consejera ha querido enfatizar que aun cuando en Andalucía se vive la "misma, dura y difícil situación económica que en otros sitios, durante todos estos años, las medidas restrictivas del presupuesto no han afectado precisamente a lo que tenía que ver con educación, empleo, sanidad, dependencia y políticas sociales". Así pues, ha defendido que las políticas sociales son siempre "una inversión" y no "un gasto" y ha pedido al PP que "no ponga ahora por delante lo que nunca fue lo primero" para ellos.
