Profesionales del Macarena defienden medidas adoptadas frente al Covid-19 tras la "alarma sobre infecciones masivas"

SEVILLA, 16 May. (EUROPA PRESS) -

Casi un centenar de profesionales del Grupo Covid-19 y de otros servicios del Hospital Virgen Macarena de Sevilla han firmado un manifiesto para "confirmar" que las medidas adoptadas frente a la pandemia "determinan una seguridad para los profesionales y pacientes del mayor nivel", toda vez que entienden que la información sobre "infecciones masivas en el centro" aparecidas en los medios de comunicación "pueden deberse a una interpretación errónea del número de profesionales dados de baja y en investigación".

En esta manifiesto, firmado por 85 profesionales, señalan que en los últimos días diversos medios de comunicación han informado sobre "infecciones masivas" por el coronavirus entre los sanitarios del hospital, lo que ha originado "una importante alarma" entre profesionales y ciudadanos, "además de un daño importante a la imagen del centro", y añaden que por este motivo han redactado este manifiesto, "iniciativa exclusivamente nuestra, con el único fin de proporcionar datos objetivos que sirvan para aclarar la situación y sin ningún ánimo de polémica", aclaran.

Así, indican que el número de profesionales del Hospital Macarena diagnosticados de Covid-19 "es de 138 a fecha de 15 de mayo", lo que supone "el 2,6% de los más de 5.300 profesionales del Hospital, y el 16% de los profesionales sanitarios infectados en la provincia de Sevilla". Y añaden que "cada caso es doloroso para todos, porque son compañeros y, en muchos casos amigos, varios de ellos firmantes de esta carta".

Además, explican que el diagnóstico "se ha realizado con la prueba más sensible disponible (PCR)" y añaden que los datos provisionales del estudio que se está realizando a todos los profesionales mediante serología "indican una cifra más baja debido a la menor sensibilidad de estas técnicas.

"Los datos del estudio de seroprevalencia nacional publicados recientemente por el Ministerio de Sanidad indican una prevalencia de personas con cualquier tipo de anticuerpos frente al coronavirus en la provincia de Sevilla del 2,7%. Por lo tanto, y esto es muy importante, estos datos indican que el riesgo de adquirir la infección en los profesionales del Hospital Macarena ha sido similar a la de la población general", manifiestan.

También subrayan que en su Hospital "se ha realizado un extenso despistaje de profesionales infectados, habiéndose realizado PCR a más de 2.000 profesionales, incluyendo a todos los que trabajan en las áreas más expuestas a pacientes Covid-19, además del estudio de seroprevalencia general, gracias al intenso trabajo llevado a cabo por los profesionales de Medicina Preventiva y de Microbiología".

De este modo, estos profesionales creen que la información sobre "infecciones masivas" en sanitarios del Hospital "puede deberse a una interpretación errónea del número de profesionales dados de baja y en investigación, que es muy superior al número de infectados", y aclaran que "cuando un profesional se considera contacto de riesgo de una persona infectada es dado de baja hasta descartar que tenga infección por el coronavirus".

"Esta medida de prevención, junto con la detección activa y exhaustiva de los posibles contactos, ha hecho que hubiera un alto número de sanitarios en investigación y ha causado en determinadas fechas un importante número de bajas", insisten, para añadir que "afortunadamente la inmensa mayoría de estos compañeros han sido negativos".

Estos profesionales explican que durante los días 20 a 22 de marzo ocurrió un brote de casos de infección en profesionales de urgencias que "afectó a un número de hasta 53 profesionales, a pesar de haberse implantado días antes los circuitos diferenciados de pacientes con y sin sospecha de Covid-19" y recuerdan que en esas fechas el uso universal de mascarillas quirúrgicas "no estaba recomendado por ninguna organización nacional o internacional". "De hecho, se advertía por estas organizaciones que podría aumentar el riesgo de transmisión al aumentar la frecuencia con que los profesionales se tocan la cara y producir una falsa sensación de seguridad", añaden.

Además, aseguran que "existía una importante carestía de mascarillas y un número muy limitado de equipos de protección individual en todos los hospitales del país, lo que obligaba a contar a diario con cuantos equipos se contaba", y lamentan que "ocurrieran varios robos de equipos disponibles para hacer frente a un posible aumento de casos, lo que obligó a custodiar los estocajes".

También indican que el "cuidadoso" análisis epidemiológico realizado por el Servicio de Medicina Preventiva "concluye que la transmisión probablemente ocurrió, en la mayoría de los casos, entre sanitarios, en relación con la dificultad para mantener la distancia de seguridad entre los mismos debido a la estrechez de los espacios para profesionales del área de urgencias", aunque "no puede descartarse, por supuesto, algún caso de transmisión desde pacientes".

"Por ello, el 25 de marzo, y coincidiendo con que por primera vez había disponibilidad suficiente, se decidió recomendar el uso universal de mascarillas quirúrgicas en el centro para prevenir la transmisión desde compañeros asintomáticos", afirman estos profesionales, que recuerdan "que en ese momento todavía ningún organismo nacional o internacional lo recomendaba" y destacan que "
afortunadamente la disponibilidad de equipos de protección se fue normalizando progresivamente en todos los hospitales".

DESTACAN QUE "FUE PIONERO" EN HACER PCR A TODOS LOS INGRESADOS

Los firmantes agregan que "pocos días más tarde se diagnosticaron algunos casos de Covid-19 en pacientes que habían ingresado por otro motivo, sin síntomas" y "debido a que estaba empezando a describirse en estudios de cierta calidad la importancia de la transmisión desde pacientes asintomáticos, se decidió realizar PCR a todos los ingresados y, desde entonces, a todos los nuevos ingresos", una medida que el hospital "fue pionero en implantar", que "se mantiene con gran esfuerzo de todos los profesionales implicados" y cuya necesidad de mantenerla "deberá replantearse en el futuro si la incidencia de Covid-19 en la población sigue siendo tan baja como lo ha sido en las últimas semanas".

Por tanto, para los suscriptores de este manifiesto "es perfectamente comprensible que el brote descrito y la interpretación errónea de la información disponible hayan creado una importante alarma en los profesionales", una alarma a la que "contribuyen las imágenes que cada día se difunden de profesionales usando equipos de protección innecesarios tal como se señala en las recomendaciones del Ministerio (escafandras, monos, calzas), que lógicamente los profesionales han reclamado, pensando que eran necesarias".

"Por ello, y para tranquilidad de nuestros compañeros, queremos confirmar que las medidas adoptadas determinan una seguridad para los profesionales y pacientes del mayor nivel que puede proporcionarse en la actualidad, motivo por el que podemos legítimamente sentirnos orgullosos", subrayan.

Terminan agradeciendo a todos lo profesionales "su entrega y profesionalidad", mostrando su apoyo a los que se han infectado por el virus, transmitiendo su "dolor" por los fallecidos y destacando su "compromiso con la ciudadanía en la lucha frente a esta terrible pandemia".