ZARAGOZA 20 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, prepara un plan de ahorro en el sector público autonómico para reducir el déficit de la Comunidad Autónoma en unos 80 millones de euros hasta final de 2010 y que consistiría en la reestructuración de las sociedades públicas.
El jefe del Ejecutivo autónomo intervino hoy en el Pleno del Parlamento autónomo, donde compareció para afirmar que el Estado de Bienestar "está en juego", defendió las medidas de recorte del gasto público anunciadas la semana pasada por el presidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, y prometió fusionar empresas públicas y reducir su número.
El plan sobre el que trabaja el Ejecutivo aragonés tiene como "eje fundamental" la reestructuración del sector empresariañ público, incluyendo la realización de "desinversiones" y fusiones de empresas, lo que afectará a unas 25 sociedades públicas.
Además, "media docena" de sociedades públicas se liquidarían y disolverían, siempre para realizar una mejor gestión de activos. En los supuestos en que sea jurídicamente posible o conveniente se llevaría a cabo una gestión conjunta de las sociedades públicas y se favorecería la gestión única de varias sociedades.
EUROPA NO ARRANCA
Marcelino Iglesias reclamó a "todos" que hagan un "esfuerzo" para que Aragón participe en la reducción de seis puntos del déficit publico español, mediante los recortes anunciados la semana pasada por el presidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero.
El jefe del Ejecutivo autónomo expresó que "Europa no está arrancando", mientras que sí lo están haciendo los países emergentes, entre los que citó a China, India y Brasil.
Marcelino Iglesias enmarcó, de este modo, los recortes de Rodríguez Zapatero en la crisis europea, marcada, en su opinión, por la falta de una política fiscal y económica unitarias, que reforzarían al euro, y la desconfianza de los países del Norte de la Unión Europea (UE) hacia los del Sur, a raíz de la quiebra del Estado en Grecia.
Los países del Sur "estamos en el foco", continuó Marcelino Iglesias, quien insistió en defender la "decisión rotunda" de Zapatero, en alusión a las medidas anunciadas por Zapatero, cuyo origen está en el hecho de que "nos estábamos endeudando un punto sobre 100 cada día", de tal manera que "si no se taponaba la borrachera -del gasto público--, lo demás no tenía sentido". Según Iglesias, el Gobierno de España "no quería ir tan rápido en la reducción del déficit".
"Europa no está arrancando y el resto del mundo está arrancando", insistió Marcelino Iglesias, quien reconoció que "estamos pasando por un momento de máxima dificultad", lo que se concreta en la necesidad de ahorrar 60.000 millones de euros, "un esfuerzo titánico".
LA CRISIS, "DE GOLPE"
"De golpe y porrazo nos vino una crisis rotunda, profunda" con consecuencias como el aumento del paro, que Iglesias achacó al hecho de que "no había normas", aludiendo así al proceso de desregulación de la economía internacional iniciado a finales del siglo pasado por los gobernantes considerados neoliberales.
"El sistema financiero ha funcionado sin normas" y "todo era posible", lamentó Iglesias, quien lo ejemplificó afirmando que las hipotecas basura eran legales y acabaron contaminando todo el sistema financiero internacional.
En el caso de Aragón, el presidente aragonés afirmó que "nadie podíamos prever la tormenta que se avecinaba" cuando, Aragón inició el año 2008 creciendo por encima del cuatro por cien, las cuentas públicas tenían superávit y había pleno empleo.
Iglesias matizó que, en toda España, sí había una "previsión" ante "un tema peculiar", como era "la burbuja inmobiliaria" y, de hecho, ya en 2006 y 2007 "pensábamos que teníamos un problema", pero "no atisbó nadie" a comienzos de 2008 "que el mundo financiero internacional iba a hundirse estrepitosamente".
El presidente reconoció que en 2009 se produjo una "enorme contracción" en la economía aragonesa, en parte debido a la "especialización" industrial de la economía regional.
Según Marcelino Iglesias, en Aragón "empezará antes el próximo ciclo de crecimiento" y reconoció que "nuestro problema fundamental es el desempleo", tras lo que defendió la decisión de aumentar el déficit público como herramienta para "mantener el gasto social".
Iglesias expresó que la posición de la deuda pública aragonesa es mejor que la media de comunidades autónomas, de ahí que la situación de las arcas públicas de Aragón esté "bastante más saneada" que la media española, tanto en lo relativo a la deuda pública como el déficit.
El presidente rehusó dar los datos concretos sobre la repercusión del ajuste en Aragón, ya que el Gobierno de España no ha aprobado todavía el Real Decreto sobre el recorte.
Dijo que las personas afectadas por el desempleo y los empresarios que han tenido problemas a causa de la crisis no deben ser las que afronten el mayor esfuerzo, sino aquellos que mantienen el trabajo, es decir, "se les solicita su contribución para volver a la senda del crecimiento de nuestra economía".
AHORRO
Iglesias recordó que los miembros del Gobierno autónomo tienen congelados sus respectivos salarios desde hace más de dos años. De la congelación de las pensiones, el presidente aragonés dijo que sólo se aplicará en 2011.
El ahorro en gasto farmacéutico sería de 500 millones de euros en toda España, unos 15 millones en el sistema aragonés, prosiguió Iglesias, quien dijo que se dispensarán medicamentos en monodosis y se adaptará la venta de medicamentos a la cantidad de fármacos que deba tomar el paciente.
Iglesias apostilló que estas medidas de ajuste se suman a las medidas que ya estableció el Gobierno de Aragón en los Presupuestos autonómicos de 2010, donde se realizó un ajuste de 118 millones de euros, reduciendo un cuatro por cien el gasto corriente y otros gastos, como los relativos a publicidad.
"Nunca he ocultado los problemas que tenemos", aseveró Iglesias, quien pidió a todos que sean "responsables" y afirmó que, en los Presupuestos de 2010, el Gobierno de Aragón redujo todas las partidas, excepto las dedicadas a los gastos financieros, en un 4 por ciento. Como ejemplos, señaló que los gastos de divulgación y promoción descendieron un 36,19 por ciento y los de reuniones y conferencias, un 45,57 por ciento, lo cual "es un dato".