TERUEL 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Conjunto Paleontológico Teruel-Dinópolis ha retomado por quinto año consecutivo los trabajos de excavación en el yacimiento de La Roma 2, en la localidad turolense de Alfambra, respecto al que han indicado que se están encontrando restos "muy completos" de mamíferos de una antigüedad en torno a diez millones de años.
El yacimiento de La Roma 2 fue descubierto en el año 1980 y en el año 1982 se publicó una nota preliminar acerca de su contenido paleontológico. En dicho trabajo se atribuyó la asociación fósil al Vallesiense superior (Mioceno superior), debido a la presencia del roedor 'múrido Progonomys cf. cathalai'.
Entre el material de macromamíferos obtenido, destaca la presencia de tres especies de rinocerótido, una de las cuales fue definida en este yacimiento, la Alicornops alfambrense, han señalado desde la Fundación Conjunto Paleontológico Teruel-Dinópolis en un comunicado.
Asimismo, otras tres nuevas especies han sido descritas también en este yacimiento, que constituye por lo tanto su localidad tipo, el género de bóvido Aragoral ("la cabra de Aragón"), con su especie tipo Aragoral mudéjar, el mósquido (artiodáctilo) Micromeryx soriae y el équido Hipparion laromae.
Por otro lado, dentro del conjunto de la fauna fósil estudiado, resalta el interés tafonómico del yacimiento, al ser uno de los pocos de Teruel que permite recuperar huesos largos completos o cráneos de grandes vertebrados. De hecho, en la campaña de 2007, se recuperó uno de los escasos cráneos completos de Hipparion conocidos en Teruel.
Recientemente, se ha conseguido conocer el tipo de vegetación que había en la zona gracias al estudio de los granos de polen contenidos en excrementos fósiles de hienas, resultados que se presentaron en el congreso de la asociación de paleontólogos de vertebrados europeos celebrado este año en Francia.
El interés de conocer mejor el origen de esta asociación fósil y de documentar con mayor precisión las nuevas especies de rinoceronte, bóvido y équido, así como de tratar de reconocer la asociación de carnívoros --prácticamente desconocida hasta el momento-- motivaron que en 2006 se iniciara una nueva etapa de excavaciones, que continúan hasta la actualidad, con el apoyo de la dirección general de Patrimonio Cultural del Departamento de Educación Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón.