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ZARAGOZA, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente del Partido Aragonés (PAR) y portavoz en las Cortes de Aragón ha indicado que la actitud de Valencia, que exige al ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, primar aún más el criterio de las Comunidades más pobladas, resulta inaceptable para Aragón que saldría especialmente e injustamente perjudicada.
Para Boné, estas "exigencias" del presidente de la Comunidad Valenciana, Alberto Fabra, "son injustas e inaceptables ya que, si se prima aún más el criterio de las más pobladas, las más despobladas, como Aragón, que cuenta con importantes singularidades sin reconocer, seguirían 'sine díe' en el pelotón de las permanentemente perjudicadas", ha resaltado en una nota de prensa.
El parlamentario ha pedido al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que, en caso de modificación del sistema actual, se negocie en base a la lealtad y justicia financiera y se aplique con equidad, sin tener en cuenta las presiones de algunas Comunidades Autónomas que cuentan con gran población y peso en Madrid "de otra forma, con unos territorios cada vez más ricos y otros territorios cada vez más pobres, se estaría abocando a un peligroso desequilibrio autonómico".
Boné, que ha vuelto a reclamar justicia financiera para Aragón, ha valorado que esta comunidad no puede quedarse en el pelotón de las comunidades eternamente perjudicadas por el sistema de financiación autonómica, si se reforma el modelo actual "dicha reforma debe servir para que a Aragón se le reconozcan todas y cada una de sus peculiaridades como manda nuestro Estatuto de Autonomía".
Ha recordado que el texto estatutario reconoce en su disposición adicional sexta que "para la fijación de las inversiones del Estado en Aragón, en infraestructuras, se ponderarán, con carácter prioritario, los costes diferenciales de construcción derivados de la orografía, así como su condición de comunidad fronteriza, y se incorporarán criterios de equilibrio territorial a favor de las zonas más despobladas".
En este sentido, Alfredo Boné, que entiende que de la financiación autonómica depende en buena parte el desarrollo y futuro de un territorio, ha argumentado que Aragón cuenta con una densidad demográfica inferior a la nacional, comarcas que son verdaderos desiertos demográficos, muchos municipios, una población envejecida y muchos pueblos terminales donde más de la mitad de la población tiene una edad superior a los 65 años.
