Rudi cree que Iglesias antepone su condición de socialista a la de "presidente de todos los aragoneses"

Actualizado: martes, 1 septiembre 2009 15:36

ZARAGOZA, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -

La presidenta del Partido Popular en Aragón, Luisa Fernanda Rudi, consideró hoy que el nuevo modelo de financiación autonómica "no beneficia a Aragón", y que por tanto, el presidente de la Comunidad autónoma, Marcelino Iglesias, "ha antepuesto su condición de dirigente del Partido Socialista a la de presidente de todos los aragoneses".

Rudi opinó que un modelo basado en la densidad poblacional "no beneficia a Aragón", sino más bien "todo lo contrario". Para la dirigente popular, la revisión del sistema de financiación "no era necesaria" y se ha acometido "en el peor momento posible, cuando la crisis hace que los recursos sean muy limitados".

Según Luisa Fernanda Rudi, el último modelo de financiación para 2002-2009, que fue pactado en julio de 2001, "no necesitaba una revisión" completa, sino que hubiera bastado con "ajustar las cifras de población según los padrones".

La revisión del sistema se ha producido, a su juicio, como consecuencia de "la aprobación del Estatut de Cataluña", tesis que defendió recordando la "entrevista que apareció en julio en un periódico de tirada nacional en la que los dirigentes de Esquerra Republicana de Catalunya contaban cómo había sido el proceso de negociación y cómo al final las cifras se había encajado en función de las demandas del tripartito catalán".

Todo ello significa, para la presidenta popular, que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "ha sacrificado un modelo que tenía que ser solidario y ecuánime para todas las comunidades", por sus "intereses de mantenimiento del gobierno tripartito en Cataluña y de sus intereses de apoyo en el parlamento nacional".

Para Rudi, el nuevo modelo rompe el "principio de solidaridad" que se acordó cuando se redactaron la Constitución y los Estatutos. "Se pactó la aplicación del principio de igualdad de todos los españoles", subrayó, "de manera que las comunidades más ricas ayuden a que las de menor renta puedan llegar a alcanzar sus mismas cotas de desarrollo".

En la misma línea, explicó que hasta ahora, "para la financiación de los servicios públicos fundamentales se aplicaba el principio de solidaridad al cien por cien de la bolsa común", mientras que ahora, según dijo, "este principio se limita al 80 por ciento", justo lo que "pidió Cataluña". Todo ello conllevará, a su juicio, que "las comunidades más ricas estén cada vez más separadas de las menos ricas".