UGT y CC.OO. Aragón hacen un llamamiento a "expresar el rechazo" a unas medidas "injustas y desequilibradas"

Europa Press Aragón
Actualizado: jueves, 3 junio 2010 20:40

ZARAGOZA 3 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los secretarios generales de UGT Aragón y CC.OO. Aragón, Julián Lóriz y Julián Buey, respectivamente, hicieron un llamamiento a los trabajadores para que expresen el "rechazo" a las medidas propuestas por el Ejecutivo central para reducir el déficit y que calificaron de "injustas y desequilibradas".

Ambos sindicatos colocaron hoy una mesa informativa en la Plaza de España de Zaragoza en la que se recogieron firmas en contra de la medida y se pidió que acudan a las concentraciones convocadas el próximo 8 de junio en Zaragoza, Huesca, Teruel y Alcañiz (Teruel), a las 20.00 horas, para mostrar su rechazo al recorte.

En este sentido, Julián Lóriz indicó que el plan de ajuste "va contra los trabajadores, los pensionistas, es injusto, desequilibrado y no va a contribuir a la recuperación de la economía, sino a agravar una situación en la que el empleo debe ser la prioridad".

En declaraciones a los medios de comunicación, Lóriz dijo que "estamos realizando en toda la región acciones de sensibilización y movilización en polígonos industriales, centros de trabajo y en la calle con el objetivo de explicar la situación y decir que esta convocatoria del movimiento sindical va a respaldar la iniciativa de los sindicatos de la función pública ante la degradación salarial", expuso.

Por su parte, el secretario general de CC.OO. Aragón, Julián Buey, indicó que en las mesas informativas "estamos contando que las medidas del Gobierno de Zapatero son cobardes, que van a afectar a la parte más débil de la sociedad, no sólo a los trabajadores del sector público, sino a pensionistas, dependientes o trabajadores del sector privado".

A su parecer, Zapatero "no está siendo valiente para tomar medidas de carácter fiscal con aquellas partes de la población que tienen más recursos económicos y que en momentos de crisis complicada deberían poner más encima de la mesa", criticó.

Por ello, Buey pidió que el 8 de junio a las 20.00 horas trabajadores y ciudadanos "se sumen a las movilizaciones convocadas conjuntamente" por UGT y CC.OO., "una manifestación genérica de protesta contundente y de recordatorio de que, si la reforma laboral es lesiva para los trabajadores, caminaremos hacia una huelga general".

REFORMA LABORAL

El secretario general de UGT Aragón, Julián Lóriz, añadió que con la protesta del 8 de junio se pretende "dar una advertencia al Gobierno en el sentido de que la reforma laboral debe ser acordada por sindicatos y empresarios y, si no hay acuerdo, no puede bascular hacia la parte más fuerte que es la patronal, que quiere sacar ventaja de la crisis. Hay que continuar por la senda del diálogo y la negociación para que genere empleo".

Lóriz explicó que la prioridad de la reforma "es crear empleo". "Con las normas laborales actuales en los últimos quince años hemos creado ocho millones de empleos, lo que crea empleo es la recuperación de la economía y queremos recuperar la economía con inversión pública y privada y que el sistema financiero al que se ha ayudado para que salga de la crisis ayude a la financiación de la economía", aseveró.

Julián Lóriz estimó que la reforma laboral debería incluir "medidas para mejorar el empleo de los jóvenes y de los parados de larga duración, redireccionar las ayudas que el Estado ha venido prestando a las empresas para que favorezcan la contratación y flexibilizar los mecanismos a modo del modelo alemán de reducción de jornada para garantizar el futuro de las empresas".

Sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo con los empresarios para evitar que el Ejecutivo central imponga la reforma, el secretario general de UGT Aragón sostuvo que "la apuesta es por el diálogo y el acuerdo hasta el final, pero las medidas que el Gobierno ha tomado en el plan de ajuste han contaminado el proceso de diálogo y, sin duda, pensamos que eso produce un envalentonamiento de las patronales que no favorecen el acuerdo".

Por ello, Lóriz dijo que "no expresamos ningún optimismo, es fundamental que los trabajadores sepan que el 8 de junio nos jugamos que los sectores que quieren sacar ventaja de la crisis presionen al Gobierno para poner en marcha medidas regresivas".

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