ZARAGOZA, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Presidencia del Gobierno de Aragón, Javier Velasco, manifestó hoy que el Ministerio de Fomento "sigue con la voluntad clara de continuar haciendo el trabajo" para construir la autovía A-40 entre Cuenca y Teruel, y opinó que, por su parte, las tres Comunidades autónomas por las que transcurrirá esta infraestructura deben "seguir insistiendo en recortar al máximo los plazos".
Velasco se pronunció así durante su comparecencia ante el pleno de las Cortes de Aragón, donde informó, a petición del grupo parlamentario de Chunta Aragonesista, sobre las negociaciones del Gobierno de Aragón para que siga adelante el proyecto de construcción de la autovía A-40.
El consejero explicó que "hay que hacer las cosas bien" y por eso "tenemos que empezar el estudio informativo con el impacto ambiental", fórmula que estimó que será "el procedimiento más rápido posible" para construir la autovía.
Velasco rechazó la posibilidad de impulsar este proyecto por tramos porque explicó que la evaluación de impacto ambiental ya realizada no informó favorablemente ninguno de los tramos, sino que los analizó por separado y fue al conjunto del proyecto al que informó desfavorablemente.
"Nosotros no elegimos este modelo" de evaluación, que, por otra parte, se utiliza en muchos proyectos, pero "es lo que tenemos". El consejero agregó que existe un acuerdo entre las tres Comunidades autónomas afectadas y el Ministerio de Fomento sobre un trazado alternativo al tramo que presenta los principales problemas medioambientales.
Por eso, abogó por trabajar "por la vía del consenso" más que por la de los recursos, para conseguir una autovía "necesaria", que tenga el trazado "lo más sostenible posible" y reiteró que en dos años sería posible que estén los informes medioambientales.
El diputado del Partido Socialista, Ricardo Berdié, incidió en las tesis del consejero y aseguró que no hacer el informe de impacto ambiental sobre el conjunto del trazado "es ilegal", al tiempo que remarcó que la "voluntad política" es que este proyecto salga adelante "cuanto antes".
La diputada del Partido Popular, Carmen Pobo, lamentó que el Gobierno de Aragón no haya querido tener en cuenta las diferentes soluciones propuestas por los grupos políticos para "agilizar" esta infraestructura, algo que achacó a que "no tienen intención de hacer esta autovía", y se esconden tras "excusas de papel, papel, papel" por lo que pidió al consejero "que no nos engañen más".
El diputado de Chunta Aragonesista, Bizén Fuster, resaltó, por un lado, la "falta manifiesta de voluntad política para hacer esta infraestructura" porque "se necesitaron casi siete años para hacer una declaración de impacto ambiental" y porque no se ofreció un trazado alternativo.
Por otro, insistió en la posibilidad de hacer este proyecto "por partes" para avanzar en los dos tramos que presentan menos problemas y seguir con el estudio alternativo del otro, ya que si se somete de nuevo todo el proyecto a estudio de impacto ambiental "no tendremos ni un kilómetro de autovía en diez años".
El diputado de Izquierda Unida, Adolfo Barrena, apostó por esta autovía, pero solicitó que "se hagan las cosas bien", retirando un trazado "que no vale" y planteando otro alternativo y se preguntó por qué durante siete años "nadie ha dicho que ese trazado no servía".
