OVIEDO, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Cultura y Turismo del Principado mantendrá abierta al público, hasta el próximo 4 de octubre, la cueva de la Lluera, en San Juan de Priorio (Oviedo), coincidiendo con el periodo veraniego. Este es el segundo año en que se permiten visitas en La Lluera, considerada por los expertos como el más completo santuario exterior de arte paleolítico de Europa, según informó la Consejería en una nota de prensa.
En la Lluera I destaca la gran hornacina con representaciones de uros, ciervas y caballos fundamentalmente. El conjunto de uros organizados en línea diagonal y con una perspectiva de línea de fuga hacen de éste uno de los más expresivos del arte paleolítico del Solutrense.
Se trata de la cueva con arte paleolítico grabado más importante de la cuenca media del Nalón, zona en la que se localizan otros 12 yacimientos con arte rupestre como La Viña, Santo Adriano y Los Torneiros entre otras, todas ellas con el mismo tipo de arte y los mismos convencionalismos estéticos. Además de esta hornacina se decoran de manera completa, hasta llegar al "horror vacui", las dos paredes de la galería occidental desde la entrada hasta la zona a la que penetran los rayos de sol.
La Lluera estará abierta de miércoles a domingo, de 10 a 17 horas. Las visitas son guiadas y es imprescindible reservar previamente. Dadas las pequeñas dimensiones de la cueva, el cupo por cada turno es de seis personas.
VISITAS
La cueva de La Lluera recibió el pasado lunes a dos ilustres visitantes; el profesor de Antropología y Prehistoriador Lawrence Guy Straus, de la Universidad de Nuevo México, y la afamada novelista Jean M. Auel, autora de 'El Clan del Oso Cavernario', perteneciente a la serie 'Los hijos de la Tierra', ambientada en la Prehistoria.
Auel hizo un recorrido por diferentes cuevas y paisajes asturianos con el objeto de documentarse para la séptima entrega que cierra la saga, que se desarrollará íntegramente en la Península Ibérica. De la cueva de La Lluera destacó la gran calidad y claridad de sus grabados, en especial la "escena" de los uros de la "gran hornacina".
