LAREDO, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
Treinta alumnos de 5º y 6º de Primaria de distintos colegios de Laredo han estrenado la campaña de 'Juegos Saludables Escolares', impulsada desde la Consejería de Educación, Cultura, Deporte. La iniciativa, que se reeditará en Torrelavega y en Soto de la Marina, culminará el 21 de diciembre en el Palacio de los Deportes de Santander, donde se celebrará un encuentro final entre todos los participantes.
El objetivo es inculcar el hábito deportivo entre los estudiantes no federados, así como transmitir consejos para adquirir hábitos saludables.
La jornada inaugural, que se ha desarrollado en las pistas de atletismo del estadio 'Javier Cortezón', ha contado con la presencia del director general de Deporte, Javier Soler; el alcalde de Laredo, Ángel Vega, el jefe de sección de Deporte Escolar de la Consejería, Javier Cubero; el concejal de Deportes, Ramón San Julián; y el director del Instituto Municipal de Deportes, José Miguel Elu.
Tanto Soler como Vega han destacado la importancia de la práctica del deporte al margen de lo competitivo, como una forma de adquirir un estilo de vida sano y fomentar valores constructivos como la cooperación con los compañeros y el respeto a los rivales.
Los estudiantes han participado a lo largo de dos horas en distintos talleres formativos así como en varias pruebas deportivas. En uno de los talleres impartidos en la Casa del Deporte los chavales han recibido información sobre alimentación saludable para prevenir la obesidad. Cada uno de los alumnos ha podido colocar distintos alimentos en la pirámide nutricional recomendada para adquirir unos correctos hábitos alimentarios.
Otro de los talleres ha estado enfocado a los primeros auxilios y se ha centrado en transmitir a los alumnos las nociones básicas de funcionamiento de los desfibriladores portátiles, cada vez más habituales en instalaciones deportivas como el campo de fútbol de San Lorenzo. Los niños se han familiarizado con un equipo que puede ayudar a salvar vidas si se reacciona con prontitud ante una situación de crisis cardiaca.
Junto a la parte formativa, los participantes han practicado el juego del disco volador o frisbee. La última de las pruebas ha consistido en una carrera de 800 metros para verificar resistencia y velocidad de todos los participantes. Al término del programa deportivo, todos ellos han sido obsequiados con una camiseta y un diploma, y los más destacados en cada categoría han sido premiados con una medalla. Este proyecto piloto se prevé extender en próximas ediciones a una mayor población de Cantabria.
