Absuelto el 'ladrón de peluches' del delito de agresión a una mujer con discapacidad

Actualizado: martes, 22 mayo 2012 14:38


SANTANDER, 22 May. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Cantabria ha absuelto al conocido como 'ladrón de peluches' (llamado así por la Policía debido a que robaba en el interior de vehículos que tenían este tipo de muñecos) del delito de agresión sexual hacia una mujer con minusvalía física y enfermedad mental del que estaba acusado y por el que fue juzgado a principios de mes.

Pese al relato de la víctima, que denunció la agresión presuntamente cometida en diciembre de 2010 por el hombre, un amigo suyo con el que decía mantener relaciones ocasionales, no se encontraron heridas que corroboraran que hubo un forcejeo y se recuerda que en un primer momento la denunciante no habló de violación y dijo que habían discutido.

Pese a las lesiones de carácter más sexual que sí sufrió y están acreditadas, la sentencia entiende que no tienen por qué ser indicativas de una violación, sino que pueden responder también a una penetración que hizo daño, como ella mismo declaró en el juicio.

El tribunal duda de la veracidad del testimonio de la denunciante ante las contradicciones de su testimonio en las distintas sentencias que fue presentando y sus declaraciones ante la Policía, ante la cual luego sumó una denuncia de robo.

Los agentes que la atendieron esa noche declararon en el juicio que ni la vieron semidesnuda, ni dijo que había sido violada, limitándose a hablar de una discusión.

Por lo que sí se le condena, a nueve meses de prisión, 480 euros de multa e indemnización de 180 euros, es por un delito de resistencia a la autoridad y una falta de lesiones, cuando atacó a los agentes policiales.

El acusado estaba en las inmediaciones del lugar, dentro de su coche, después de los hechos, cuando los agentes llevaron de vuelta a su casa a la denunciante y le pidieron que se identificase, a lo que reaccionó con insultos, amenazas y agresiones.

PENAS SOLICITADAS

El Fiscal consideraba que los hechos constituían un delito de agresión sexual y uno de resistencia a agentes de la autoridad, por el que pedía penas que sumaban 10 años y nueve meses de prisión.

A esto se sumaban 12 años de prohibición de aproximarse o comunicar con la víctima, multa de 600 euros, e indemnizaciones de 6.150 euros para la mujer, y 180 para el agente de policía agredido.

La acusación particular, ejercida por la víctima, elevaba la petición de cárcel a 14 años de prisión, y las indemnizaciones a 18.150 euros.