Dos años y dos meses de prisión para el joven que agredió y atacó con una navaja a otros dos en Muriedas

Actualizado: lunes, 8 noviembre 2010 12:27

SANTANDER, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

K.K.L. será condenado a dos años y dos meses de prisión por agredir y atacar con una navaja a dos jóvenes que se encontraban, en diciembre de 2007, en la Plaza de la Constitución de Muriedas (Camargo).

El acusado, de 25 años de edad (21 en el momento de los hechos) y nacido en China, ha aceptado esta pena, fruto de un acuerdo entre la defensa, acusación particular y el Ministerio Fiscal antes de la celebración del juicio en la Audiencia Provincial de Cantabria.

En virtud de este acuerdo, se rebaja la petición por un delito de homicidio en grado de tentativa a uno de lesiones y, en consecuencia, la pena solicitada desciende desde los seis años iniciales que pedía el Ministerio Público y los siete que planteaba la acusación particular hasta los dos años.

A esto se suman otros dos meses de prisión por una falta de lesiones, que se mantienen igual. Y se aplica como circunstancia atenuante el hecho de que haya abonado la indemnización, que asciende a 42.000 euros, por encima de los 18.000 que pedía el Ministerio Público y los 20.900 que reclamaba la acusación particular.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 22 de diciembre de 2007 en la Plaza de la Constitución de esta localidad. Según ha admitido el condenado, se acercó a los jóvenes, a los que no conocía, y les increpó diciéndoles: "De qué vais, qué decís de mí".

Al mismo tiempo, K.K.L. sacó una navaja que tenía escondida en la mano y se abalanzó sobre uno de ellos, rozándole el cuello con la hoja.

Acto seguido, salió corriendo y se dirigió a otro miembro del grupo, que estaba a unos 25 metros de sus amigos, y, sin mediar palabra, se abalanzó también sobre él y le apuñaló por la espalda, en la zona lumbar. Tras la agresión, el acusado huyó del lugar en un vehículo.

Las víctimas resultaron heridas, una con una lesión punzante leve y la otra con daños lumbares que requirieron cerca de un año de curación, pese a lo que le han quedado secuelas: una cicatriz y lumbalgia moderada.