Archivo - Médico de Atención Primaria ayuda a una persona con riesgo de suicidio - ISTOCK - Archivo
Ocho de cada diez de los fallecidos eran hombres y no hay ninguna víctima menor de 15 años
MADRID/SANTANDER, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
Cantabria registró el año pasado 48 muertes por suicidio, dos más que en 2023, lo que supone un incremento del 4,35 por ciento, que contrasta con el descenso del 3,96% a nivel nacional, según muestran los datos definitivos publicados por el Instituto Nacional de Estadística.
Del total, 39 eran hombres, lo que suponen más de ocho de cada diez del total de fallecidos por esta causa.
En 2024, murieron por suicidio ocho varones más que el año anterior en la comunidad, lo que supone un incremento de más del 25 por ciento.
En sentido contrario, el número de mujeres fallecidas por suicido en Cantabria ha caído un 40% en un año, hasta las 9.
El 37,5 por ciento de los fallecidos de 2024 por suicidio o lesiones autoinfligidas en Cantabria tenía entre 30 y 50 años.
De hecho, el grupo de 45 a 49 años es el que más decesos aglutina, siete, los mismos que los registrados entre quienes tenían entre 65 y 69 años. En contraposición, según los datos del INE, ninguno de los fallecidos tenía menos de 15 años, igualando el resultado de 2023.
En España, se registraron en 2024 un total de 3.953 por suicidio, lo que supone 163 defunciones menos por esta causa que en 2023 (-3,96%), y el segundo descenso consecutivo.
Sin embargo, las muertes entre menores de 20 años aumentaron, pasando de 76 a 90.
La mayoría de muertes por suicidio se produjeron en hombres, que representaron el 73,4 por ciento de los casos (2.902), con una tasa de 12,1 por 100.000 frente a 4,2 (1.051) en mujeres. Para el Ministerio de Sanidad, que ha compartido los datos, esto exige la incorporación de estrategias con perspectiva de género que combatan los obstáculos para la expresión emocional y la petición de ayuda entre los hombres, y respondan a la vulnerabilidad y necesidades específicas de las mujeres.
Según los datos del INE, las tasas más altas se concentran en hombres de 85 años o más. Entre los 85 a 89 años el riesgo superó los 40,2 por cada 100.000 habitantes, cinco veces la media nacional y superior al dato de 2023 (36,7), lo que evidencia el impacto de la vulnerabilidad asociada a aislamiento, enfermedad crónica y pérdida de redes de apoyo.
El total de fallecimientos en menores de 30 años también disminuyó, desde los 364 suicidios en 2023 a los 344 en 2024. Sin embargo, dentro de este grupo se registró un aumento en los menores de 20 años, cuyos casos pasan de 76 a 90.
Para el Ministerio de Sanidad, que ha compartido este jueves los datos, pese a la tendencia descendente observada, el suicidio continúa siendo una "cuestión prioritaria en el ámbito de la salud pública".
Sanidad ha destacado que el suicidio no puede explicarse únicamente desde la perspectiva clínica, sino que se trata de un fenómeno multicausal en el que los determinantes sociales, económicos y culturales ejercen una influencia "decisiva" y crean entornos de alta vulnerabilidad donde el riesgo de suicidio se multiplica.
El Ministerio ha destacado las condiciones socioeconómicas entre los factores determinantes en el riesgo suicida. En concreto, ha apuntado que la falta de ingresos suficientes, la precariedad laboral y la inseguridad económica generan un contexto de vulnerabilidad que limita la capacidad de cubrir necesidades básicas y planificar el futuro. Junto a esto, la incertidumbre sobre el empleo, la ausencia de oportunidades y la presión económica sostenida incrementan la sensación de falta de control sobre la propia vida.
En este contexto, Sanidad ha resaltado las actuaciones que ha impulsado en el último año para reforzar la atención y prevención en este ámbito. El Plan de acción de salud mental 2025-2027, acordado por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), cuenta con 39 millones de euros para mejorar la calidad y la accesibilidad de los servicios, reducir los tiempos de espera, humanizar los espacios asistenciales y fortalecer la formación de profesionales.
Este plan se está desarrollando a través de 224 proyectos actualmente en ejecución, que contemplan medidas para mejorar la atención ciudadana, reforzar los servicios de salud mental infanto-juvenil, impulsar el apoyo entre pares y avanzar en la integración de la salud mental en el primer nivel asistencial. Cada iniciativa se diseña con el objetivo de construir un sistema más accesible, cercano y centrado en las personas.
De manera complementaria, Sanidad ha destinado 17,83 millones de euros al Plan de acción para la prevención del suicidio 2025-2027, que establece la prevención como una prioridad de salud pública. Este plan apuesta por acompañar a las personas en situación de vulnerabilidad, sensibilizar a la sociedad, mejorar la formación especializada y ampliar los recursos disponibles.
Dentro de esta estrategia integral, el Ministerio de Sanidad pone a disposición de la ciudadanía la Línea 024, un servicio público, gratuito, confidencial y operativo las 24 horas del día, todos los días del año. Desde su puesta en marcha en mayo de 2022 hasta finales de noviembre de 2025, este servicio ha atendido más de medio millón de llamadas.