Barreda desea que "Castilla-La Mancha sea una región familiar" y dice que el plan beneficiará también a la clase media de la región
TOLEDO, 10 Ene. (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Castilla-La Mancha va a destinar durante este año 660,1 millones a la aplicación del Plan Integral de Apoyo a la Familia, que entre otras medidas contempla deducciones fiscales, conseguir la universalidad de la atención a los niños de 0 a 3 años, y la creación del Observatorio Regional de la Familia.
Así lo avanzó en el acto de presentación el consejero de Bienestar Social, Tomás Mañas, encargado de coordinarlo, que explicó que el plan, vigente hasta el 2011, no es un cúmulo de medidas "huecas", sino que se desglosa en siete ejes, 28 programas y 61 objetivos específicos, y contempla 283 actuaciones encaminadas a mejorar el bienestar de todas las familias de Castilla-La Mancha.
Mañas, que matizó que se trata de un plan transversal que integra las actuaciones que en favor de la familia ya desarrolla su departamento --junto con la Consejería de Educación y Ciencia, Trabajo y Empleo, Vivienda y Urbanismo y Economía y Hacienda--, apuntó que a este conjunto de medidas se añadirán otras nuevas que se ajustan a las características y necesidades de las familias castellano-manchegas.
El responsable regional de Bienestar Social, que apuntó que el plan es fruto del trabajo realizado por muchos colectivos, asociaciones, e instituciones, dijo que para el primer eje, denominado Potenciación del Bienestar de las Familias, el Gobierno destinará 388,6 millones de euros para desarrollar las 56 actuaciones encaminadas a favorecer la autonomía de los grupos familiares.
Así entre las medidas que contempla este eje se encuentra la creación de ayudas para pagar estancias en los centros residenciales de mayores; la reducción del precio de los Centros de Atención a la Infancia (CAI'S); deducciones fiscales por nacimiento o adopción, por discapacidad; y ayudas por hijo a las familias numerosas.
Bajo el epígrafe, Prevención, Promoción y Socialización, el segundo eje del plan, el Ejecutivo regional destinará 41,8 millones de euros a entre otras medidas, crear un Observatorio Regional de la Familia; desarrollar foros de participación; y acciones formativas dirigidas a las familias como unidades educadoras.
OTRAS ACTUACIONES.
En el tercer eje, Atención a situaciones familiares de Especial Vulnerabilidad y de Conflicto, la Junta invertirá 18,45 millones de euros a acometer entre otras actuaciones, una red de centros de Día de Atención a la Familia y a los adolescentes en municipios de 20.000 habitantes; y a crear equipos itinerantes de prevención e intervención en violencia familiar.
Para el cuarto eje de actuación, Atención a menores en situaciones especiales, se invertirán 28,62 millones de euros, dirigidos a crear un centro de recursos para la orientación y apoyo a los jóvenes extutelados; y un programa de mediación para la solución de conflictos intrafamiliares.
El consejero de Bienestar Social señaló que otro de los puntos importantes del plan es el quinto eje de actuación, centrado en la conciliación de la vida laboral y familiar, que prevé conseguir la universalidad de la atención a los niños de 0 a tres años; ampliar los horarios de los CAI's, así como ayudas a la empresas que cuenten en sus instalaciones con este tipo de centro, para lo que destinará 22,84 millones de euros.
Respecto al sexto eje de actuación, el dedicado a apoyar a las familias con personas en situación de dependencia, el Gobierno regional articulará un cantidad de 159,5 millones de euros para acometer 44 actuaciones que prevén dar un fuerte impulso tanto a la atención domiciliaria, como a los servicios de estancias diurnas, y a la atención residencial.
Por último, indicó Mañas, para el séptimo eje, dedicado a la Formación e Investigación, de invertirán 326,161 millones de euros para desarrollar 24 actuaciones, entre ellas la aplicación de las nuevas tecnologías a la gestión de recursos de atención a la infancia, becas de investigación sobre temas de familias o formación para los profesionales.
C-LM, REGIÓN FAMILIAR.
Por su parte el presidente regional, José María Barreda, que expresó su deseo de que "Castilla-La Mancha sea una región familiar, dada la importancia capital que la familia tiene en la sociedad como célula vital", apuntó que el reto colectivo más importante que está abordando su Ejecutivo es conseguir igualdad real de oportunidades.
Dicho esto, aseguró que este Plan se enmarca en ese contexto "ambicioso, porque queremos que familia sea instrumento eficaz en el perfeccionamiento de la sociedad de bienestar social", y se comprometió, como presidente, a coordinar y dar el empuje institucional que necesita el documento "porque invertir en familia va a resultar muy rentable".
Así, defendió que con la aplicación de las actuaciones previstas, no sólo se beneficiarán las clases más necesitadas, sino que lo revolucionario de este plan es que salpicará también a las clases medias, las más numerosas en Castilla-La Mancha, que hacen una aportación importante a la economía y al conjunto social castellano-manchego, y "por ello es lógico que repercuta en ella los beneficios de la política social".
"Mi aspiración como presidente --dijo-- es que Castilla-La Mancha destaque sobre todo por cómo trata a aquellas personas que necesitan de la solidaridad del conjunto, lo que caracteriza a una sociedad civilizada y moderna, algo que sólo se puede conseguir si se mantiene esa relación familiar".
Mientras, el presidente de la Asociación de las Familias Numerosas de Castilla-La Mancha, José Luis García Rufo, en representación de todos los colectivos que han participado en la elaboración del documento, reconoció que el Plan presentado hoy impulsa aún más las políticas "atrevidas" que el Gobierno regional hace a favor de este colectivo.
García Rufo defendió que el documento da un respuesta importante a la promoción y a la participación de la familia con la creación de un Observatorio Regional, seminarios y foros de participación, otorgando más voz a la familia como transmisora de valores.
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