Las empresas que desarrollen acciones formativas para desempleados podrán acceder a subvenciones de la Junta

TOLEDO 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

Las empresas que desarrollen acciones formativas, tanto para sus trabajadores como para desempleados, con compromisos de contratación, podrán acceder a las subvenciones de la Consejería de Empleo y Economía en materia de formación.

Así lo recoge la orden que regula el desarrollo de la formación profesional para el empleo en materia de formación de oferta, que entra en vigor este martes y que publica el Diario Oficial de Castilla-La Mancha y recoge Europa Press.

Dicha Orden, que modifica a la del 2008, regula toda la formación profesional para el empleo que se imparte en el ámbito de Castilla-La Mancha, e incluye como novedades principales la creación de una nueva modalidad de formación, la Modalidad V, que incluye la formación que se gestiona en los centros propios de la Administración.

Otras novedades son la modificación de los procedimientos para la realización de prácticas profesionales y para la concesión de becas y ayudas, así como los criterios y procedimientos para la solicitud de subvenciones, la ejecución de la formación y la justificación de los gastos.

CINCO MODALIDADES DE FORMACIÓN

La nueva normativa establece cinco modalidades de formación, dirigidas a personas trabajadoras ocupadas, a personas desempleadas y a personas con necesidades formativas especiales. Contempla también formación planificada para el desarrollo estratégico de la región y la formación que se imparte en los centros dependientes de la Administración Autonómica.

Entre ellas, destacan las acciones dirigidas a personas desempleadas que favorezcan la innovación y el espíritu empresarial, las dirigidas a asesorar en la creación de pequeños negocios o las acciones que favorezcan las competencias lingüísticas.

Para poder participar en estos procesos de formación los beneficiarios deberán figurar inscritos como desempleados, o en el caso de las personas trabajadoras ocupadas, deberán tener su domicilio o su puestos de trabajo en Castilla-La Mancha.

La Administración realizará una preselección entre los trabajadores desempleados, aunque serán los responsables de impartir la formación los que hagan la selección definitiva.

Esta orden contempla también becas para personas desempleadas que tengan reconocido al menos una discapacidad del 33%, y personas pertenecientes a colectivos determinados. También se contemplan ayudas para el transporte y para la conciliación, dirigidas a desempleados con cuidado de hijos menores de seis años o de familias dependientes.

FINANCIACIÓN Y ENTIDADES BENEFICIARIAS

En cuanto a la financiación de esta acciones de formación, el departamento que dirige Carmen Casero ha determinado que se financiarán mediante subvenciones públicas, en régimen de concurrencia competitiva, previa convocatoria, mediante contratos o subvenciones públicas concedidas en régimen de concesión directa.

En el caso de la formación dirigida prioritariamente a personas ocupadas, serán entidades beneficiarias de dichas subvenciones las organizaciones empresariales y sindicales, confederaciones y federaciones de cooperativas, asociaciones de trabajadores autónomos de carácter intersectorial, así como centros y entidades inscritos en el Registro de Centros y Entidades que imparten Formación Profesional para el Empleo.

Podrán impartir formación para desempleados, organizaciones empresariales y sindicales, empresas que desarrollen acciones formativas con compromiso de contratación y Centros Integrados de Formación Profesional, de titularidad privada.

En el caso de los programas específicos para la formación de personas con necesidades formativas, podrán ser beneficiarios de las subvenciones las Administraciones locales e instituciones públicas, así como las Administraciones Públicas competentes en materia de formación profesional para el empleo.

Para acceder a estas subvenciones, los beneficiarios deberán estar inscritos en el Registro de Centros y Entidades que imparten Formación Profesional para el Empleo en Castilla-La Mancha, estar al corriente del pago de sus obligaciones tributarias y tener el domicilio social o una delegación o centro de trabajo en Castilla-La Mancha.