TOLEDO 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Parlamentario Popular quiere ver si el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda "se aplica el cuento o no" de la austeridad, durante el debate presentado por el PP sobre la necesidad de reducir el número de altos cargos en la Junta, ya que, según la portavoz del PP en las Cortes, la actitud del responsable regional es la de "consejos vendo pero para mí no tengo".
En rueda de prensa, para detallar el contenido de las iniciativas que el PP llevará al pleno de mañana en las Cortes, Guarinos criticó que Barreda "no sólo no tiene reparo en engañar y traicionar a Castilla-La Mancha sino que ha demostrado que su hipocresía no tiene límites" en torno a este asunto.
Así, destacó cómo ayer en el Congreso, Barreda votó en contra de una reducción de altos cargos en el Gobierno de España, como responsable de los diputados del PSOE que rechazaron la propuesta del PP, dejando claro que "cuando está aquí dice que sí pero cuando está allí dice que no".
Guarinos recriminó al responsable autonómico que pida austeridad "para todos, pero no para él", y añadió que con sus acciones el Ejecutivo de Castilla-La Mancha demuestra que "no da más de sí" que "están amortizados" y que su cabeza visible es un "pésimo gestor, mal político, pero buen socialista".
En este sentido, el Partido Popular propondrá en el debate "todo lo que sea coherente", convencido de que su petición "no es un disparate" sino algo "normal" en una época de crisis como la actual, y seguro de que cualquier cosa es necesaria, aunque sea pequeña.
DESEMPLEO
De otro lado, la portavoz de los 'populares' en las Cortes se preguntó si el Gobierno regional está entre el más del 20 por ciento de españoles para quienes el paro no es un problema, teniendo en cuenta que "no hay ningún dirigente del PSOE que cese y que inmediatamente no sea colocado y recolocado en otro cargo público".
De ahí que en torno al debate general planteado por el PP sobre la evolución del desempleo en esta legislatura, los 'populares' arremetan contra el presidente regional, porque "se encontró esta región en junio de 2007 en una situación que rozaba el pleno empleo" y ahora "ha traído las mayores cifras del paro que hemos conocido en Castilla-La Mancha".
Algo que tachó como "una gran injusticia social" y que hace que Barreda se haya "convertido en una máquina de hacer parados", al igual que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, convirtiéndose en una persona que traiciona la confianza depositada en los castellano-manchegos.