VALLADOLID, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -
El nuevo obispo auxiliar de Valladolid, Luis Argüello, durante su ceremonia de ordenación como prelado, ha invitado a los políticos a pedir "algo más que el voto cada cuatro años" o "cada seis meses, como en esta ocasión", y les ha ofrecido la "catolicidad del corazón".
"Queremos ofreceros nuestro amor a la vida en medio del invierno demográfico, queremos colaborar en el impulso y renovación del Estado del Bienestar con nuestra presencia en la educación, la sanidad y los servicios sociales", ha manifestado en su alocución ante los miles de fieles congregados en la Catedral metropolitana de Valladolid.
En este sentido, ha recordado que en la Iglesia se puede "cultivar la amistad fraterna que se mantiene más allá de los turnos de poder y oposición".
Argüello se ha comprometido a seguir en su nuevo cometido episcopal el ejemplo de Cristo, que "no vino a ser servido, sino a servir", tras lo que ha mostrado su intención de ser un obispo "kerigmático", como emisario de la Palabra de Dios, así como "orante y pastor".
Para el flamante prelado, este cometido supone "una nueva oportunidad" de seguir a Cristo, "el que se despojó en el pesebre y se vació en la cruz", así como de "anunciar la belleza de su rostro, la novedad del Evangelio y la alegría de la misericordia" para "ensanchar la justicia de su reino".
Por otro lado, se ha referido también a la "segunda oportunidad" que se le presenta "para vivir el sacerdocio apostólico en la escucha más honda de la Palabra para anunciarla con más audacia"; para "servir con mayor transparencia los sacramentos de su gracia"; para "hacer visible la fraternidad sacramental" y asumir "el pastoreo de esta iglesia que peregrina en Valladolid", y para "vivir la caridad pascual".
La ceremonia de ordenación, celebrada este viernes, ha estado presidida por el cardenal arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Ricardo Blázquez, quien ha agradecido al Papa Francisco la rapidez en la respuesta a la solicitud para que la Diócesis contara con un obispo auxiliar y ha animado a Argüello a gastar su vida "con sencillez y dedicación apostólica, con obediencia y gratitud a Dios y con misericordia humilde para con los pecadores, los necesitados y los excluidos".
Se trata del tercer arzobispo auxiliar de la historia de la Diócesis de Valladolid tras Mariano Cidad (1897-1903) y Pedro Segura (1916-1920).