CABEZÓN DE PISUERGA (VALLADOLID), 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
Efectivos de la Guardia Civil han detenido a cuatro personas por el robo de 1.770 tubos de riego y numerosas llaves de paso por valor de 13.000 euros en Cabezón de Pisuerga (Valladolid) y a una quinta por receptación, han informado a Europa Press fuentes del instituto armado.
En concreto, en el marco de la operación 'Lotubero', se ha detenido a cuatro vecinos de la citada localidad de entre 32 y 38 años como presuntos autores de un delito de robo y hurto de material de riego, y una quinta persona, como supuesto autor de un delito de receptación del material sustraído.
Las investigaciones se iniciaron tras las denuncias presentadas por los propietarios de dos explotaciones agrícolas sitas en el término municipal de Cabezón en las que denunciaban la comisión de dos hechos delictivos, un delito de robo con fuerza y un delito de hurto, en los que los autores habrían sustraído alrededor de 1.770 tubos de aluminio y numerosas llaves de paso o corte de agua, todo este material utilizado para el riego agrícola, y valoraban la mercancía sustraída en más de 13.000 euros.
Así, el Equipo Roca de la Guardia Civil de Valladolid, dentro de los cometidos específicos de investigación de delitos contra el patrimonio (robos y hurtos) cometidos en el ámbito agrícola y ganadero, realizó varias inspecciones en chatarrerías o centros de reciclaje de la provincia, dado que estos establecimientos suelen ser los receptores finales de los efectos sustraídos (diversos metales).
De esta forma, localizaron en una de las chatarrerías inspeccionadas unos 1.860 kilogramos de tubos de aluminio, los cuales se encontraban dañados y cortados, así como 27 kilogramos de latón, que pudiera proceder de un componente metálico que se encuentra en el interior de las llaves de paso utilizadas para el riego.
La Guardia Civil requirió a las víctimas de los hechos delictivos para que reconocieran los tubos de aluminio localizados en la chatarrería y pudieron acreditar la procedencia de ellos como parte de los que le fueron sustraídos en los robos denunciados.
Sin embargo, no se pudieron recuperar los mismos puesto que cuando fueron localizados por los agentes en el establecimiento de reciclaje habían sido cortados a la mitad por los autores para evitar ser localizados y facilitar su transporte hasta el centro de reciclaje.
