La Guardia Civil interviene 8.100 artificios pirotécnicos en Burgos durante una campaña de inspección

BURGOS 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil ha intervenido en Burgos un total de 8.100 artificios pirotécnicos que se vendían sin garantía de seguridad en una nave durante la última campaña de inspección llevada a cabo durante las últimas Navidades.

Según han informado fuentes de la Benmérita en un comunicado recogido por Europa Press, las inspecciones se han llevado a cabo en 23 establecimientos de la capital burgalesa.

La Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de Burgos inspeccionó los 17 comercios autorizados por la Subdelegación del Gobierno, en los que no detectó ninguna irregularidad, pero la campaña se completó en otros seis establecimientos (bazares), donde se sospechaba que se podía vender sin garantía de seguridad artificios pirotécnicos, lo que provocó la intervención del material expuesto en una nave.

Anualmente, la Intervención de Armas y Explosivos realiza dos campañas, aparte de otras inspecciones rutinarias, con el fin de localizar, inmovilizar y retirar del mercado los productos que puedan suponer un riesgo para la salud o la seguridad.

La venta de este material está regulada por el Real Decreto 563/2010, de 7 de mayo, que aprueba el Reglamento de Artificios Pirotécnicos y Cartuchería.

La venta, según han recordado desde la Guardia Civil, debe realizarse únicamente por personas físicas o jurídicas que cuenten con autorización del delegado del Gobierno, excepto para algunos de los artificios pirotécnicos de categoría 1 que podrán venderse en cualquier establecimiento comercial previa notificación a la Intervención de Armas y Explosivos de la Guardia Civil.

La normativa prohíbe la venta ambulante de artículos pirotécnicos, así como la puesta a disposición de los consumidores por debajo de unas edades mínimas y el envío de los productos que hayan sido vendidos al público por correspondencia, teléfono o medios informáticos, imponiendo la obligación de la presencia del comprador en el local.

La venta y tenencia de este tipo de material requiere unas condiciones de seguridad y almacenamiento perfectamente reglamentadas. La omisión de las mismas constituyen infracciones administrativas, denunciables a la Ley de Seguridad Ciudadana y Reglamento de Artificios explosivos.