La policía concluye que el incendio en el piso de La Pilarica de Valladolid fue "claramente deliberado"

Actualizado: viernes, 24 junio 2011 16:30

Fiscalía y las acusaciones particulares mantienen su petición de 12 años para el procesado, frente a la petición absolutoria de la defensa

VALLADOLID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -

Dos peritos de la Brigada de la Policía Científica de la Policía Nacional de Valladolid ha concluido hoy que el incendio registrado en noviembre de 2008 en un piso del barrio de La Pilarica fue "claramente deliberado", afirmación categórica que desmontaría la versión del siniestro accidental alegado por el procesado, Carlos M.R, para quien, por tal motivo, el Ministerio Fiscal y las tres acusaciones particulares personadas en la causa mantuvieron la petición de 12 años de cárcel.

La prueba pericial practicada en la segunda y última jornada del juicio celebrado en la Audiencia de Valladolid ha perjudicado notablemente los intereses del acusado y de su defensor, ya que ambos expertos de la Policía Nacional, quienes inspeccionaron el piso siniestrado un cuarto de hora después del suceso, se han mostrado categóricos al descartar la hipótesis del accidente y apuntar que la intencionalidad está en el origen del incendio y deflagración registrados a primera hora de la mañana del 5 de noviembre de 2008 en el 6º B del número 18 de la calle Doce de Octubre.

En la reconstrucción de los hechos, los peritos, en declaraciones recogidas por Europa Press, han explicado que la colocación de una bombona de butano en la galería del piso, la apertura del regulador y la aproximación a la espita de la llama de un encendedor o una cerilla, después de que durante un tiempo indeterminado se mezclaran el gas y el aire, fue el detonante del siniestro, sin que llegaran a precisar con certeza si primero se produjo un incendio de pequeñas dimensiones y luego la deflagración o si bien ambos fueron simultáneos.

"La bombona había sido extraída de la cocina y habían cortado el tubo de goma a la altura del regulador con un cuchillo de sierra como el que se encontró en el lugar de los hechos", ha explicado uno de los funcionarios, quien, al igual que su compañero, ha insistido en que el punto de ignición no fue el salón, contrariamente a lo sostenido por el procesado, sino la galería, "pues en el primer caso el efecto habría sido todavía más grave y posiblemente se habría producido la rotura de tabiques, pero al ser en la galería la onda expansiva se proyectó hacia el exterior".

LA BOMBONA NO TENÍA DEFICIENCIAS

Además, los integrantes de la Brigada de Policía Científica han señalado que la bombona, que presuntamente fue luego trasladada de la galería al salón y desprovista del regulador, que apareció abierto y tirado en el suelo, no presentaba deficiencias que pudieran llevar a pensar que se produjo una fuga de gas.

Ante ello, las acusaciones pública y las tres particulares, en representación estas últimas de las compañías aseguradoras, han mantenido invariable su petición de 12 años de cárcel para Carlos M.R, junto con indemnizaciones cercanas a los 26.000 euros--21.236 de ellos para la propietaria de la vivienda y el resto para los propietarios de distintos vehículos dañados--, como autor de un delito de estragos o, alternativamente, de un delito de incendio.

Todas ellas, apoyadas en los informes periciales, han rechazado la versión del incendio accidental ofrecida, y han considerado acreditado que fue provocado por el imputado, posiblemente, según la fiscal, fruto del deterioro de la relación sentimental con su entonces pareja y propietaria del piso, quien cuatro días antes le había despedido del bar que ella regentaba y que la noche anterior le había enviado un SMS advirtiéndole de que no iba a dormir en casa.

La defensa, en cambio, ha pedido un fallo absolutorio y, alternativamente, una condena mínima de un año por un delito de daños.