SALAMANCA, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas de 'la Caixa' celebra sus primeros diez años de trayectoria en Castilla y León, una década en la que ha atendido a 6.133 personas en situación de enfermedad avanzada y 13.763 familiares de la Comunidad.
Así lo recoge el balance presentado este jueves en el Colegio Arzobispo Fonseca de Salamanca, en un desayuno informativo en el que han intervenido el subdirector general de la Fundación Bancaria 'la Caixa', Marc Simón; la directora del Área de Pobreza y Salud de la Fundación Bancaria 'la Caixa', Montse Buisán; el director científico del Programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas, Xavier Gómez-Batiste; el director territorial de Caixa Bank Castilla y León y Asturias, Marc Benhamou, junto a tres personas atendidas por el programa.
A nivel global, el programa, enmarcado en la Estrategia de Cuidados Paliativos del Sistema Nacional de Salud, se implementa a través de una red de Equipos de Atención Psicosocial (EAPS) distribuidos por todo el Estado y proporciona a enfermos y familiares una atención que complementa la labor que las unidades de cuidados paliativos realizan en hospitales y domicilios.
Según Marc Simón, su finalidad es alcanzar una atención integral basada en el apoyo emocional, social y espiritual al paciente y a sus familiares, y también en la atención al duelo, el apoyo a profesionales de cuidados paliativos y el acompañamiento a cargo de más de 1.000 voluntarios de toda España.
A día de hoy, el programa se implementa en 128 hospitales de toda España y en133 unidades de apoyo domiciliario, a través de 42 EAPS formados por psicólogos, trabajadores sociales, enfermeros, médicos, agentes pastorales y voluntarios.
Respecto a los datos concretos en Castilla y León, el programa, que ha contado en la Comunidad con una inversión de 2,2 millones de euros desde su origen y que en el pasado ejercicio sumó un desembolso de unos 360.000 euros, actúa en siete centros hospitalarios y ocho equipos de soporte de atención domiciliaria, a través de dos EAPS.
DOS EQUIPOS EN CYL
Por un lado, el EAPS de Salamanca, perteneciente a la Asociación para el Desarrollo de los Cuidados Paliativos y el Tratamiento del Dolor (ACPD) trabaja en el Hospital Universitario de Salamanca - Los Montalvos, Hospital Universitario Río Hortega (Valladolid), Complejo Asistencial de Ávila, Complejo Asistencial de Zamora y en siete equipos de atención domiciliaria.
El EAPS, encabezado por el doctor Francisco Vara, está formado por cinco psicólogos y dos trabajadoras sociales. A lo largo de los 10 años, este equipo ha atendido a 5.013 pacientes y 11.294 familiares.
Por otro lado, el EAPS de Burgos, perteneciente a la Fundación Burgos por la Investigación de la Salud, interviene en el Hospital Universitario de Burgos (HUBU), Hospital Santos Reyes de Aranda de Duero, Hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro y en un equipo de soporte de atención domiciliaria Dirigido por el doctor Javier Arias, cuenta con dos psicólogos y una trabajadora social. Éste fue puesto en marcha en 2015, y desde entonces ha atendido a 1.120 pacientes y 2.469 familiares.
EVALUACIÓN
La primera evaluación científica del programa concluye que la atención psicosocial ofrecida responde a las necesidades de los enfermos atendidos y mejora en el 90 por ciento los síntomas a nivel anímico y psicológico.
Según Marc Simón, el estudio establece que el 92 por ciento de las personas enfermas califica de "excelente o muy buena" la atención recibida, y cerca del 90 por ciento asegura que ha podido resolver temas pendientes (la mayor parte de ellos, vinculados a la comunicación y la relación con la familia y el entorno).
PERFIL DEL USUARIO
La documentación aportada por el subdirector general de la Fundación Bancaria 'la Caixa' señala que la media de las personas atendidas se sitúa en 71 años, en el 53 por ciento de los casos hombres, con enfermedad oncológica en el 66 por ciento de los usuarios y con un estado de animo malo o regular en el 72 por ciento de los pacientes.
En cuanto a las preocupaciones principales para ellos, la familia, el control de los síntomas, la autonomía, el malestar físico y los hijos son las mayoritarias para los beneficiarios de este programa estatal.
