20 años de cárcel para una pareja por asesinar a la madre de ella asestándole 66 puñaladas

Actualizado: viernes, 21 febrero 2014 18:11

TARRAGONA, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Tarragona ha condenado a 20 años de cárcel a una pareja que el 27 de febrero de 2012 asesinó a la madre de ella asestándole un golpe en la cabeza con una botella de licor y 66 puñaladas en la cara, el cuerpo y los brazos.

En la sentencia se recogen los hechos considerados probados por el Jurado popular que juzgó el caso este enero, que les declaró culpables y consideró que Nathalie C.R. y Antonio P.S. entraron en el piso de la madre en Salou usando un juego de llaves de la hija y aprovechando que estaba en la cama la asesinaron.

La víctima, que se percató de la presencia de la pareja y trató de defenderse tras el primer golpe con la botella, recibió de las dos personas 66 puñaladas en la región craneofacial, la región cervical, el tórax, el abdomen y en los brazos.

La mujer, de 69 años, perdió de dos a tres litros de sangre y murió de un shock hipovolémico, y según recoge la sentencia, sufrió "mucho dolor" a consecuencia de este ataque.

Según la Audiencia, el Jurado contó con un "rico cuadro de prueba" para alcanzar el veredicto, basado en los testigos, las conclusiones médico-forenses, los análisis de ADN y otras diligencias; especialmente, que en la escena del crimen se hallaron restos de sangre de los dos acusados.

Ante estos hechos, el magistrado-juez condena a 20 años de prisión a Nathalie C.R., y a indemnizar a su hermano con 125.000 euros, y considera que "despreció intensamente la vida de su víctima, pero también los valores más elementales, si se permite la expresión, los más cercanos a la propia condición humana: el respeto y consideración a los propios ascendientes".

Según el juez, el juicio no ha revelado por qué actuó así Nathalie C.R., pero sí que su comportamiento homicida fue brutal, y añade que "el modo en que se dio muerte la víctima muestra una particular energía criminal y una altísima frialdad de ánimo, un propósito homicida muy arraigado en un plan de acción".

Del mismo modo, condena a su pareja a 19 años y ocho meses --puesto que él no tiene el agravante de parentesco-- y a indemnizar al hermano con 125.000 euros, y destaca "la brutalidad, la altísima violencia, el intenso propósito criminal, el alto dolor inflingido, y la frialdad demostrada en la ejecución y en los momentos posteriores".