Desde el 'obiolismo' se habla de un "estatuto europeo para Catalunya" al margen de España
BARCELONA, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -
Dirigentes del PSC que forman parte de la sensibilidad más catalanista han planteado este jueves por primera vez en un acto público ir más allá del federalismo porque está "en vía muerta".
Lo han expresado miembros de la dirección del partido como la eurodiputada Maria Badia, el diputado en el Parlament Daniel Font, y la presidenta del grupo del PSC en el Ayuntamiento de Girona, Pia Bosch, en un acto que se ha organizado en Barcelona con las cabezas visibles de esta sensibilidad del partido, donde también se ha abogado porque los socialistas apoyen el pacto fiscal y se integren en una alianza de la izquierda catalana, como han defendido la exconsellera Montserrat Tura y el alcalde de Lleida, Àngel Ros.
Desde su fundación en 1978, el PSC ha abogado históricamente por una España federal, por lo que el acto de este jueves escenifica las diferencias que hay en el seno de los socialistas catalanes sobre las relaciones entre Catalunya y el resto de España dos años después del recorte del Estatut por parte del Tribunal Constitucional (TC).
En el acto han estado presentes representantes de dos de las familias históricas del PSC, el 'obiolismo' --encarnado por Pia Bosch, Maria Badia y Daniel Font-- y el 'maragallismo' --con Montserrat Tura, Marina Geli y Àngel Ros--, que habían controlado el partido hasta 1994, en el Congreso de Sitges.
La receta que han propuesto pasa por un giro a la izquierda, siguiendo los pasos de los socialistas franceses, y que en el partido se pueda hablar sobre cualquier tema, también sobre la independencia, algo que han dicho ante la atenta mirada del hombre fuerte de los 'capitanes' que controlan el partido, el alcalde de Cornellà y secretario de Acción Política del PSC, Antoni Balmón, sentado en primera línea.
"ÚLTIMA OPORTUNIDAD"
Según han destacado, el PSC no tiene otra opción que evolucionar hacia mayores demandas de autogobierno, profundizar en medidas de regeneración democrática y tender puentes con ICV-EUiA e independentistas de izquierdas, y el exnúmero 2 de la conselleria de Economía entre 2003 y 2010, Martí Carnicer, ha reconocido que las primarias para elegir el candidato a las elecciones autonómicas serán la "última oportunidad" para el socialismo catalán.
El exprimer secretario del PSC Raimon Obiols ha defendido que la actual situación financiera de la Generalitat es insostenible, pero que el socialismo lo que debe dar son respuestas precisas y serias para garantizar un mayor autogobierno para Catalunya y una salida justa de la crisis, lo que forzosamente pasa por una alianza de izquierdas entre federalistas e independentistas para lograr un "estatuto europeo para Catalunya".
Font ha abierto el acto asegurando que hay que acabar con un partido excesivamente vertical ya que es "insuficiente" lo que ha hecho la actual dirección del PSC en este sentido, mientras que Marina Geli ha asegurado que es posible construir la Catalunya del 2030 que reconstruya los efectos negativos de las reformas neoliberales.
Para Maria Badia, es necesaria también una mayor transparencia: "En Catalunya tenemos nuestras Bankias particulares", y ha indicado que el federalismo está en vía muerta a su pesar, aunque ha indicado que rechaza la independencia porque no garantiza la permanencia en la UE y en organismos internacionales, como le ocurrió en Pakistán cuando se independizó de la India.
Bosch ha recalcado que España debe romper tabús con Catalunya: "Soy terapeuta familiar, y cuando en una familia hay un tabú --como ocurre con la independencia--, entonces hay una familia congelada, que no puede evolucionar ni crecer".
Tura ha defendido un giro a la izquierda, un nuevo lenguaje y maneras de hacer para reconectar con la sociedad, y también ha lanzado un mensaje al Estado: o reconoce la plurinacionalidad de España o lo deberá "hacer por necesidad" ante el creciente malestar y desafección entre la ciudadanía catalana.
Ros ha defendido una alianza de izquierdas: "El país necesita la suma de todos los progresistas para sacar adelante una alternativa al proyecto conservador" de CiU, y ha defendido que el PSC defienda más autogobierno y un modelo donde Catalunya tienda hacia su autofinanciación.
