El Govern identifica a 75 empresas en riesgo y pone en marcha un fondo de rescate

BARCELONA, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Govern ha identificado a unas 75 empresas catalanas del sector industrial con problemas, en la mayoría de los casos de financiación, e incluso en riesgo de desaparecer, y ha puesto en marcha un plan de rescate, con un presupuesto de 16 millones de euros, con el objetivo de mantener vivas al mayor número posible.

En una entrevista de Europa Press, el director general de Industria, Joan Sureda, ha explicado que este fondo de rescate, que está enmarcado en el Plan de Actuaciones Industriales y Empresariales 2012-2014, tiene la misión de evitar el cierre de las industrias, porque esto supone la "pérdida de un activo con un coste tremendo para el país".

Según los cálculos aproximados de Industria, gracias a estas actuaciones se han salvado unos 3.000 puestos de trabajo que, en caso contrario, se habrían perdido.

"Haciendo un símil de un partido de fútbol; aquí tan importante es meter goles, que es crecer, como que no nos hagan, que es mantener lo que tenemos; una empresa cuesta mucho de crear y que crezca, y perderla tiene un coste tremendo", ha reiterado.

La Dirección General de Industria cuenta con una plantilla de once trabajadores dedicados a atender a empresas con problemas, ya sean cuestiones "menores" como gestionar permisos de trabajo para empresas extranjeras que operan en Catalunya o solventar conflictos de licencias con ayuntamientos, o problemas que ponen en peligro la supervivencia de la compañía.

Según Sureda, en primera instancia se intenta solucionar el problema sin necesidad de inyectar dinero, como ocurrió con Cacaolat, Estampaciones Sabadell y Yamaha, pero si no hay otra salida, la Generalitat ofrece un préstamo participativo a la compañía para "mantener sus constantes vitales" mientras busca un inversor que garantice su continuidad, como es el ejemplo del fabricante de compresores Cubigel y la textil Sati, que han recibido dos millones de euros cada una.

El proceso del fondo de rescate empieza con una primera evaluación por parte de la empresa pública Avançsa, que determina si el proyecto empresarial tiene viabilidad y, en caso de tenerlo, la Generalitat trabaja junto con empresas consultoras dedicadas a fusiones y adquisiciones para diseñar el plan de negocio y la operación financiera necesaria.

CUBIGEL Y SATI

Cubigel ha sido la primera compañía sobre la que ha actuado el plan de rescate de la Generalitat, y en estos momentos ya cuenta con un nuevo propietario, la china Huayi, que ha garantizado la continuidad de la actividad industrial.

En el caso de la textil Sati, con sede en La Garriga, la Generalitat aún no ha encontrado un inversor interesado, pero Sureda se ha mostrado convencido de que habrá solución.

Ha avanzado que la Generalitat está trabajando con dos empresas que se encuentran en situaciones similares, y en una de ellas se está buscando un cambio de propietario, ya que el actual es un banco.

El objetivo del Govern con estos préstamos es "sacar todo el partido posible a las inyecciones de dinero para que roten" y no sea una inversión a fondo perdido, sino que se puedan recuperar y, según Sureda, los dos millones invertidos en Cubigel se podrá recuperar en siete u ocho meses.