BARCELONA, 14 May. (EUROPA PRESS) -
El Museu d'Art Contemporani de Barcelona (Macba) "historia" el pasado reciente con una mirada, a través de obras de su colección, a las décadas finales del siglo XX, en la muestra 'La herencia inmaterial', que se ha convertido en la primera de tres exposiciones sobre el final de los 70, los 80 y primeros de los 90 unidas bajo el título 'Aquí comienza nuestra historia'.
Así lo ha anunciado el director del museo, Bartomeu Marí, este miércoles en la presentación de esta exposición y la de 'El ojo escucha. Eugeni Bonet: pantallas, proyecciones, escritos', que ha enmarcado en la nueva senda que ha tomado el museo para convertirse en un foro de debate y ojo crítico del siglo XXI.
'La herencia inmaterial' abre con la instalación de un oso a tamaño natural --'Mi pathos doy'-- obra del artista Carlos Pazos, lo que es toda una declaración de intenciones y manifiesto de la exposición por representar una "línea cáustica de tristeza" y de celebración de la risa, ha destacado el comisario, Valentín Roma.
"Leer el final del siglo XX es una forma de ver como somos", ha destacado Marí, que ha insistido en que en este periodo se ponen las bases del presente, tanto a nivel estético, como político y económico.
La muestra reúne 109 obras, muchas de ellas nunca antes expuestas en el museo, y materiales de la época, en que destaca un espacio sonoro con compilaciones musicales que van desde el llamado Rock Radikal Vasco hasta el pop de raíces gitanas, el bakalao y el panorama 'indie' con un vinilo de 'Family'.
La exposición se articula en los ámbitos temáticos de 'Lo sagrado y lo popular', 'La calle, el mapa', 'El cuerpo y su reverso', 'Políticas de ficción', 'Autobiografía y tautología' y 'Lo intangible' que reflexionan sobre algunos desbordamientos producidos en el campo de la estética en el periodo señalado.
Cede especial protagonismo a las nuevas formas narrativas y la cultura editorial, y es que "desde el panfleto callejero hasta el blog" se dan muchos cambios en medio y los imaginarios literarios cobran mucha importancia, ha señalado Roma.
Ha argumentado que las microrrupturas que se dan durante estos periodos en algunos casos cobran más significado que las grandes efemérides en general y de ahí el interés de mostrar nuevas formas de cultura popular y manifestaciones musicales en la exposición, que no tiene un hilo musical.
Entre las obras, destaca la réplica corrosiva y mordaz de Rafael Agredano sobre 'Las señoritas de Avignon', de Picasso en versión masculina, así como también alegato racionalista de 'Trogloditte Erudite', de Sandro Chia, y la serie 'Interfaces' de Richard Hamilton y Dieter Roth.
También cabe destacar el conjunto de piezas Joan Brossa, relacionadas con la producción poética de Marcel Mariën y Nicanor Parra, así como con 'Beaux Arts', de Rogelio López Cuenca, que constituye una fuga sobre las cuestiones tratadas en este ámbito.
EL OJO PUEDE ESCUCHAR
En la otra muestra, 'El ojo escucha', el museo propone un recorrido por la obra de Eugeni Bonet desde principios de los años 70 hasta el presente, atendiendo a sus transferencias entre reflexión y práctica, así como a sus despliegues entre el marco de las artes visuales y los de la imagen en movimiento.
Este proyecto se compone de tres líneas de investigación distintas aunque complementarias: la reconstrucción de seis programaciones audiovisuales; una presentación museográfica de su quehacer artístico y la publicación de 'Escritos de vista y oído', un libro que recoge 24 textos del autor entre 1975 y la actualidad.