CASTELLDEFELS (BARCELONA), 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, ha afirmado este martes que el Tratado de Libre Comercio (TTIP) entre la Unión Europea (UE) y los Estados Unidos (EEUU) debe preservar el modelo productivo europeo y que este aspecto será una de las líneas rojas que fijará España en las negociaciones del acuerdo.
En declaraciones a los medios de comunicación durante una visita a Castelldefels, García Tejerina ha manifestado que el TTIP "es un acuerdo importante porque España tiene un sector agroalimentario muy potente y el mercado norteamericano es un mercado que piden la mayor parte de los operadores españoles ya que es una posibilidad de crecimiento y de acceder a un mercado que remunera muy bien los productos agroalimentarios españoles".
La ministra se ha mostrado partidaria de llegar a un acuerdo de libre comercio con los EEUU pero ha detallado que para España hay algunas líneas rojas que no se pueden traspasar como es "la protección de aquellos sectores que competitivamente son un poquito más débiles frente a los americanos".
Otro aspecto importante para España es que "la UE tiene un el modelo productivo especialmente exigente en cuestiones medioambientales y sanitarias, y España quiere preservar este modelo productivo, que da tantas garantías a los consumidores europeos, y preservar cuestiones de calidad tan importantes como las denominaciones de origen o las indicaciones geográficas".
"Más allá de las cuestiones de acceso tarifarias, hay todo lo que implica al modelo productivo europeo que nosotros queremos preservar y que será una línea roja en la negociación del acuerdo con Estados Unidos", ha manifestado la ministra.
En cuanto a la inclusión de los transgénicos en el TTIP, la ministra ha declarado que "es una tecnología que se utiliza cada vez en más partes del mundo y, con los controles debidos, que están garantizados por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria, no hay ninguna razón por la cual prescindir de esta tecnología".
García Tejerina ha alertado de que el sector ganadero español "tiene una pérdida de competitividad por no tener acceso a fuentes de aprovisionamiento de piensos de países para los que el cultivo de transgénicos es bastante habitual".
Por ello, ha defendido que "con todas las garantías, esto puede ser parte de un acuerdo que permita modificar de alguna manera la política europea y que el sector ganadero español tenga acceso a mayores fuentes que ofrecen piensos cultivados de esta manera y que sin ninguna duda les va a dar una mayor competitividad".
La ministra ha añadido que "el tratamiento de los transgénicos es una de las cuestiones a negociar con Estados Unidos y la posición de España es que, con todas las garantías, no hay ninguna razón para privar ni a la ganadería europea, ni a la agricultura europea de una tecnología que es comúnmente utilizada en cada vez más países del mundo".
